ay 5 parlamentarios en Navarra que forman parte de Navarra Suma pero que en realidad son de Ciudadanos y del PPN, 3 de Ciudadanos (Pérez Nievas, Bonilla y Llorente) y dos del PPN (Suárez y García). En las elecciones de 2015, el PPN obtuvo el 3,93% y en 2019 iba en caída libre por debajo del 3% que da derecho a escaño, así que Navarra Suma le vino fetén para tener dos parlamentarios que de otro modo hubiese sido casi inviable. Mientras, Ciudadanos, que en 2015 se quedó fuera del Parlamento por apenas 200 votos para llegar al 3% -sacó el 2,96%-, en 2019 quizá sí que hubiese logrado 1 o 2, pero fue Navarra Suma lo que otorgó certeza a esa hipótesis y además con 3 representantes, algo que tras el bajón tremendo de la formación naranja desde hace año y pico ahora sería una utopía. Así que el 25% de los parlamentarios de Navarra Suma son de las formaciones que ahora mismo están en guerra en media España, comenzando por Murcia y siguiendo por esa Madrid que es incapaz ni siquiera por una vez en su vida de mantenerse en un discreto segundo plano. ¿Va a ocurrir algo en Navarra con esa unión que hace las veces de oposición frontal al Gobierno de Navarra o por nuestra peculiar idiosincrasia los pactos de derecha que se resquebrajan en otros lugares aquí van a permanecer pétreos como las paredes incorruptas de los Caídos? Já, veremos. El miércoles, los líderes de PPN y Ciudadanos culpaban del tsunami en Murcia y Madrid al contrario, al tiempo que afirmaban que los parlamentarios de ambas formaciones en Navarra se llevan muy bien entre ellos, mientras Esparza, líder de UPN, expresaba su preocupación por la noticia y comentaba que "trabajamos conjuntamente pero ellos las coaliciones no las deciden aquí". Pérez Nievas, eso sí, dijo que "en Navarra vamos a mantener la coalición". Le cayó la lotería con la coalición y se va a agarrar a ella como una hiedra. O entrar en UPN. Total…