a Jon le salta una nota de aviso en el móvil y llama a su jefe. Perdona, no llego a la reunión con los de Barcelona, tengo pediatra a las nueve y diez, acabo de verlo. Marcos duda ante el armario. ¿Con qué acertar en una entrevista para un puesto de administrativo? ¿Camisa un poco abierta, pitillos negros y botines? ¿Demasiado provocador? Mejor el jersey marrón y vaqueros. Iñaki sale del portal trotando con su hija unicornio arco iris, la deja en el colegio con un beso rápido y en la esquina un hombre que le pasa un palmo de alto y otro de ancho le escanea de abajo a arriba y le suelta Qué le haría yo a ese culo? Con una mano Raúl se lleva dos copas y un par de platos de la barra mientras pasa el paño con la otra. 8,40, chicas. Clientas de aperitivo diario, la directora y la subdirectora del banco de la esquina. Si ya le digo yo a Raúl, con esa boca y ese cuerpazo, ¿qué necesidad de trabajar? ¡Tú lo que tienes que hacer es buscarte una tía como nosotras! ¿Eh, Marta? ¡Jaaaajaja! Sergio recoge la mesa y de camino a la fregadera, dos dinosaurios del suelo, deja los platos, pasa la bayeta para limpiar las lentejas que ha tirado su hijo al suelo y la enjuaga en el lavabo mientras empieza a lavarse los dientes, deja la bayeta en la cocina y se le cae el cepillo lleno de espuma dentro del zapato que se está calzando, su hijo resbala en el suelo que acaba de limpiar, se da un golpe y empieza a llorar. Le suena el móvil, un compañero. Sergio, ya sé que entras en una hora pero ¿puedes venir antes? Mi madre, que se ha caído en casa, no se puede levantar y quiero ir ya. Son las tres de la mañana, fin de la última ronda. ¡Venga, chavales! ¡Mañana nos vemos en el vermú! Gorka enfila la cuesta hacia su barrio. No hay nadie. ¿O sí? Unos pasos detrás de él. Acelera un poco. ¿Tienes prisa?