Pamplona. El partido de ayer fue muy especial para un jugador rojillo. Patxi Puñal cumplió su partido oficial 395 como jugador de Osasuna e igualó a Castañeda como segundo futbolista que más veces ha vestido la elástica rojilla en un encuentro oficial. El primero, Echeverría, se encuentra a 68 más. El capitán navarro no pudo celebrar el evento con una victoria y, además, será sancionado con un partido ya que vio su quinta tarjeta en seis encuentros.

El capitán de Osasuna, patxi Puñal, vivió ayer una jornada muy importante. El de Huarte consiguió igualar a Javier Castañeda como segundo jugador que más veces ha vestido la camiseta de Osasuna en un encuentro oficial. Puñal ha jugado esos 395 encuentros oficiales durante 14 temporadas con el primer equipo rojillo.

El centrocampista de Huarte saltó al campo portando el brazalete de capitán como en otras tantas ocasiones. El jugador navarro ocupó su demarcación habitual de pivote defensivo y ejerció perfectamente su labor como destructor del juego del Levante desde el primer minuto del encuentro.

Se le vio con ganas al capitán, algo que no es noticia, ya que es difícil de recordar un partido en el que el de Huarte no pusiese toda la carne en el asador.

Ayer volvió a ejercer esa labor oscura que no suele lucir. La afición se lo reconoció como hace en muchas otras ocasiones con cánticos y ánimos dedicados al capitán.

Incluso, ante la poca actividad ofensiva que tuvo el Levante, se animó a lanzarse al ataque. En el minuto 36, el navarro gozó de una buena ocasión al enganchar un balón muerto en la frontal del área. La pelota no quiso entrar. Fue una de las pocas ocasiones de la que gozó su equipo en la primera parte de ayer.

Después del descanso, al rojillo no se le acabó la gasolina ni mucho menos. Fue el más activo en la presión de la salida del balón del Levante impidiendo a Rubén, que jugó de segunda punta del Levante, meterse entre líneas y poner balones de peligro a Rafa Jordá. Además, resolvió bien los rechaces de las pelotas que bajaba de las nubes el espigado delantero del equipo valenciano.

Fue testigo en el gol rojillo de Pandiani y tampoco pudo hacer nada para impedir el remate de Sergio desde la frontal. Desde ese momento, el de Huarte trató de motivar a sus compañeros y de empujarles al ataque. Puso un par de balones al área de córner, pero el resultado ya no se movió más y Puñal no pudo celebrar su partido 395 con una victoria.

Ya atrás queda su íntimo amigo y compañero durante tantas temporadas César Cruchaga, que con 386 partidos oficiales, ocupa la cuarta posición en esta clasificación. Ahora sólo le queda sumar un encuentro más para dejar a Castañeda atrás y 68 para coger a Echeverría, algo difícil, pero en las piernas de Patxi Puñal no entienden de imposibles.