pamplona. ¿Siguen convencidos de que Osasuna está en la línea de juego que va a traer victorias?
Es cierto que el equipo está mejorando en cada partido, pero tampoco los resultados están llegando como deseamos, y para cambiar esa dinámica no hay otra que mejorar cada día.
El míster les dijo que están el camino correcto. ¿Lo creen así?
El equipo está trabajando bien. El pasado domingo dominamos el partido y merecimos la victoria, pero el Levante en una jugada aislada nos hizo el empate y se llevaron un empate de forma injusta. Nuestro equipo está trabajando bien y sólo falta que los resultados acompañen.
¿Cómo asumen el parón de Liga de este fin de semana?
Personalmente no me gusta, más después de haber estado sin jugar el encuentro contra el Levante por sanción. A ningún profesional le gusta, pero hay que asumirlo. Tenemos dos semanas para preparar el partido de Riazor y conseguir por fin una victoria fuera de casa que es primordial para conseguir los objetivos.
El Dépor necesita recuperarse ganando a Osasuna. En este inicio todos los partidos son finales.
En la Liga española cada partido es muy complicado porque hay equipos que están en la misma situación y necesitan puntos. El Deportivo es uno de ellos. Acaban de recibir seis goles en Madrid, pero esa es un arma de doble filo. El Deportivo va a salir a por todas, intentar que la gente no crea que son tan malos como ahora piensan. Debemos tener cuidado con ellos.
¿Se dio cuenta el otro día de que el juego del equipo no termina de conectar con la afición?
Yo creo que el equipo hizo un buen trabajo. Es cierto que no fue un partido brillante, pero el rival se cerró mucho, fue complicado y buscó la contra, pero no creó ocasiones salvo en el gol. El público puede hacer lo que quiera. Para eso paga su entrada y tiene su carnet, y los profesionales somos los que debemos engancharlos con el fútbol que desarrollemos. Contra la Real, la afición nos llevó en volandas. Se puso todo complicado y el equipo supo reaccionar. Fue un ambiente bonito.
A nivel personal está jugando bastantes minutos a pesar de llegar sin un puesto definido.
Vine para intentar jugar sabiendo que hay competencia tanto en el puesto de central como de mediocentro. He trabajo al 100% todos los días para que el míster confíe en mí.
¿Cree que juega por las bajas o porque se ha ganado el puesto?
No lo sé. Ha habido necesidades en el puesto de central, pero he ido mejorando en cada partido y estoy ahora a un buen nivel y espero que el técnico siga confiando en mí.
En cinco días pasó de jugar su mejor partido como osasunista ante la Real a padecer el peor momento con su tempranera expulsión en Cornellá ante el Espanyol.
En cada partido te la juegas y no puedes vivir del pasado, y ahora lo más importante para todos nosotros es el encuentro del Dépor.
¿Vio con más tranquilidad por la televisión las dos jugadas que concluyeron en su expulsión?
Osasuna alegó la segunda tarjeta amarilla. Yo no toqué al jugador, pero también entiendo que el árbitro estaba en una posición complicada y tomó la decisión de expulsarme. He cumplido la sanción, hay que aceptarlo y ahora me debo centrar en el partido contra el Dépor.
¿Cree que hubiese sido expulsado si jugase en un club más grande como el Sevilla?
No me gusta hablar de los árbitros y los profesionales les debemos ayudar lo máximo posible. Lo mejor es aceptar sus decisiones.
Para Riazor es baja Puñal, ¿se ve jugando de medio centro?
Yo sigo trabajando y esa pregunta es para el míster, que es el que tiene el once en la cabeza.
Cuando llegó dijo que era un mediocentro más que un central. ¿Se arrepiente de haberlo dicho?
En los dos últimos años jugué como mediocentro, y en los anteriores de central. Siempre he dicho que me siento cómodo en las dos posiciones y lo único que quiero es ayudar al equipo sea de central o pivote.