pamplona - Osasuna tiene dos días para saldar las deudas con los jugadores que mantienen las denuncias por impagos y así evitar el descenso administrativo, ya que el plazo concluye el 31 de julio, el jueves. Las próximas jornadas resultan entonces definitivas para decidir el futuro del club que, una vez reconducidas sus relaciones con la Hacienda Foral -el futuro de la deuda deberá ser objeto de alguna resolución por parte del Parlamento, tal y como ha advertido la consejera de Economía y Hacienda, Lourdes Goicoechea-, va a dar carpetazo a este contencioso.

Desde Osasuna se comunicó ayer que se van a solventar las deudas en el plazo y que no va a existir problemas ante la Liga de Fútbol Profesional y la AFE. Algunos rotativos deportivos habían indicado que cinco futbolistas mantenían las denuncias a Osasuna ante la Liga, pero desde el club se limitaron las diferencias a tan solo dos jugadores y que, además, no iba a haber problemas para saldar satisfactoriamente la situación.

Osasuna no va a encontrar problemas para la inscripción del equipo en la Segunda División toda vez que tiene el beneplácito de la Hacienda Foral y también se tiene el certificado de la Seguridad Social que acredita estar al día acerca de los pagos correspondientes.

Desde que terminó la temporada, se consumó el descenso y estalló, a continuación la crisis institucional -con la salida de Archanco y su junta, la designación de la comisión gestora y la asunción de que el club podría no ser viable-, la frontera del 31 de julio quedó como fecha inexcusable para el cumplimiento de todos los requisitos.

Tras el ok de Hacienda y la documentación en regla por parte de la Seguridad Social, la resolución del conflicto con los futbolistas -asunto de verdadero calado porque Osasuna arrastra una deuda grande con los jugadores- termina por cerrar el escenario que le va a permitir al equipo competir la próxima temporada en Segunda.

Los jugadores. Osasuna va a solventar los problemas por las denuncias de los jugadores.

Seguridad Social. El club dispone también del certificado de la Seguridad Social que acredita que ha satisfecho los pagos.

31 de julio. Es la fecha tope para tener todo en regla.