pamplona - Cada vez falta menos para que arranque la competición oficial y los futbolistas buscan aclarar su futuro lo antes posible. Ese es el caso de Eneko Satrústegui. El de Villava quedó desvinculado de Osasuna en junio, cuando finalizaba su contrato. El conjunto rojillo negoció con su representante la posibilidad de que continuara vistiendo la elástica del equipo navarro, pero no llegaron a un acuerdo y ahora el canterano se encuentra sin equipo.
Ante esta situación, decidió enrolarse en las filas de la selección de futbolistas sin equipo de la AFE y con ella se proclamó campeón del FIFPro Tournament, tras ganar en la final a Francia por 1-0. Una decisión que tomó con las miras puestas a abrirse al mercado exterior y con la esperanza de recibir ofertas de los ojeadores que lo siguen, como ya le ocurriera el pasado año a otro navarro, Fernando Cabero, que después de vencer también en el mismo torneo el pasado año recaló en las filas del Sestao River.
Ayer, en declaraciones ofrecidas a Navarra Televisión, Satrústegui aseguró que ha surgido interés de algunos equipos por varios de los componentes de dicha selección. Pero dejó claro que su deseo continúa siendo jugar en Osasuna.
“Soy de Osasuna desde pequeño y lo que me gustaría es seguir jugando aquí”, confesó el lateral izquierdo, que confirmó la proposición que le realizó el club rojillo para contar con él en Segunda División, así como que no llegaron a un acuerdo.
“El club me hizo una oferta y, después de valorarla, consideramos que no era apropiada”, aclaró. Y continuó revelando que “poco después realizamos una contraoferta y todavía no hemos recibido una respuesta, ni afirmativa ni negativa”.
Ahora, el de Villava continúa entrenándose en solitario en Pamplona a la espera de resolver su futuro. Un futuro que, a pesar de las diferencias surgidas, le gustaría que siguiese ligado al club que le ha visto crecer como futbolista. “Jamás me cerraría las puertas de Osasuna”, finalizó Satrústegui, que ve en la posible marcha de Joan Oriol una opción para su vuelta. - N. Pérez