Pamplona - Osasuna, que anda buscando el equilibrio que le dé solvencia y proyección en el campeonato, ganó en Vallecas con autoridad en el marcador (0-3) y el partido de esta tarde en casa con el Almería le da la oportunidad de sumar tres puntos más de forma consecutiva para otorgarle un empuje considerable a su situación en la clasificación, a su marcha en el inicio de la Liga. El comienzo más o menos dubitativo por algunos marcadores -los empates en El Sadar, fundamentalmente- quedaría entonces apartado, las ilusiones de muchos restauradas y la condición de favorito, de equipo hecho para la tarea del ascenso, reconsiderada en parte. En esta categoría tan igualada, sumar seis puntos seguidos da para mucho porque supone salirse del guión que dicta que, con pocas diferencias entre los equipos, a cada jornada, cualquiera se lleva un susto por esta mínima distancia.
Los seis goles en dos partidos, en Copa con el Albacete (3-2) y en la Liga con el Rayo, son un argumento contundente para la cita de esta tarde, también el evidente aumento de rigor defensivo que le permitió al equipo no encajar gol alguno en este último compromiso. Entre la pegada en ataque y el tono defensivo hay un mundo para la mejora, para la consolidación del grupo al margen del cronómetro de las urgencias que otros han puesto en marcha muy pronto.
Osasuna logró un resultado tan rotundo, haciendo muchas cosas bien, como para que el entrenador repita el equipo que enseñó su pegada en Vallecas. Quizás el buen estado de forma de Xisco, autor de tres goles en dos partidos -uno al Albacete en la Copa y dos al Rayo en la Liga-, plantee alguna alternativa para el juego de ataque. Todos los delanteros de Osasuna han marcado -Quique, David Rodríguez y el propio Xisco- y los tres ofrecen perfiles distintos y un alto grado de inquietud entre las defensas.
Los rojillos, además, no hay que olvidarlo, afrontan otra semana con tres partidos seguidos, dos de ellos fuera de casa, y el entrenador dispone también del argumento de administrar los esfuerzos de sus jugadores para repartir minutos entre los futbolistas. En un grupo animado por los últimos marcadores es también más fácil este ejercicio de gestión del personal.
Osasuna se entrenó ayer a puerta cerrada en El Sadar y Diego Martínez aplaza hasta hoy las decisiones finales para configurar la lista de citados para el encuentro. Unai García no estará entre los citados porque los problemas en una de sus rodillas que le han obligado a ceder su sitio en el equipo no acaban de desaparecer -las dolencias vienen desde antes del partido con el Huesca-.
El Almería ha empezado bien la temporada y el técnico de Osasuna, dentro del buen tono general de su rival, destacó un nombre, Pozo. Si un futbolista es capaz de desnivelar un partido por sí solo, los rojillos ya saben con quién andarse con ojo.