PAMPLONA. Los últimos minutos de los encuentros son territorio rojillo. Osasuna ha ganado 18 puntos gracias a goles conseguidos a partir del minuto 75, aunque, por contra, ha perdido 9 en el mismo tramo de partido, pero sólo 3 de ellos a partir de la jornada 11. El cambio que dio Osasuna en el encuentro contra el Málaga de la primera vuelta se percibe en muchos aspectos diferentes. Uno de ellos es el rendimiento del equipo en los últimos 15 minutos de sus duelos. Hasta ese encuentro, el equipo rojillo se había dejado 7 puntos en ese tramo de los partidos. Después, solamente ha perdido 3, concretamente los del encuentro en Santa Cruz de Tenerife de hace tres jornadas, cuando Osasuna dilapidó un 0-2 favorable.

Hasta ese partido contra el conjunto malacitano en El Sadar, el equipo de Jagoba Arrasate no había sacado ningún punto en esos últimos minutos de juego. A partir de entonces, los rojillos han tomado este espacio temporal, el último cuarto de hora de sus compromisos oficiales, para dar el último golpe al marcador, como ocurrió, sin ir más lejos, el pasado domingo en Lugo.

La clave reside en que los rojillos impregnan los partidos de una gran intensidad, algo que provoca que muchos rivales no aguanten el órdago que les echa Osasuna hasta el final. Ahí es cuando los rivales se caen física o mentalmente y los pupilos de Arrasate mantienen el nivel para aprovecharse y rascar más puntos, como ocurrió el último fin de semana.

La fortaleza física de los rojillos viene acompañada por una creencia en sus posibilidades no recordada por los rojillos más veteranos del lugar. Los jugadores de Osasuna nunca pierden la esperanza de sumar. De hecho, los rojillos no se conformaron en Lugo con nivelar los dos goles de desventaja que tenían, sino que buscaron, aunque sin éxito, el tercer tanto que les diera la victoria. Y lo hicieron sin ningún tipo de especulación.

ROBERTO TORRES, PICHICHI Osasuna ha marcado 18 goles en los últimos 15 minutos de sus partidos. El máximo goleador en este tramo de los encuentros es Roberto Torres, quien ha anotado cuatro tantos en ese periodo. Algunos han servido para ganar, como el que anotó ante el Alcorcón en El Sadar; otros para empatar, como el que le metió al Numancia en Soria cuando el partido estaba a punto de finalizar. Detrás del centrocampista de Arre se encuentra Juan Villar. El pichichi de Osasuna a tiempo completo ha marcado en tres ocasiones más allá del minuto 75, con la curiosidad de que dos de ellas han sido contra el Málaga, una en Pamplona y la otra en La Rosaleda.

La lista de goleadores del último cuarto de hora la completan Brandon, Rubén García, Íñigo Pérez y Xisco, todos ellos con un tanto en los últimos 15 minutos de los partidos. MÁLAGA Y LUGO, POR PARTIDA DOBLE Hay dos equipos que han sufrido los buenos últimos 15 minutos de Osasuna: Málaga y Lugo. Ambos han encajado tantos en este tramo tanto en los duelos de ida como en los de vuelta. El conjunto malacitano llegó a este tramo en El Sadar con ventaja, pero se marchó de Pamplona sin puntos en la mochila tras encajar dos tantos. En La Rosaleda, el marcador estaba nivelado, pero Villar acabó dando los puntos a Osasuna con un postrero gol. Al Lugo le ocurrió algo parecido. En El Sadar, Íñigo Pérez marcó el tanto de la victoria rojilla en el minuto 90. En el Anxo Carro, el conjunto local alcanzó el minuto 75 de partido con ventaja en el marcador, pero Xisco firmó el empate pasado el 90 y Villar envió un balón al poste poco después. Son éstas algunas pruebas fehacientes de que Osasuna casi siempre sale ganando en el último tramo de sus partidos. Pura cordura en la locura final.