El mejor jugador de la 30ª edición del Torneo Interescolar de Fundación Osasuna, disputado a finales de 2011 y principios de 2012, jugó el pasado domingo en El Sadar. Se trata de Oihan Sancet (Pamplona, 25/4/2000), un espigado mediapunta de 1,88 metros de altura. El matiz es que lo hizo como rival del conjunto navarro y con la camiseta del Athletic, el club que le sedujo en 2015 después de formarse hasta los 15 años (ahora tiene 19) en las categorías inferiores de la cantera rojilla. El pamplonés alcanzó así su primera titularidad como profesional en un escenario que no le es desconocido del todo, ya que hace casi ocho años desfiló sobre su césped con la copa de campeón del torneo navideño que desde hace aproximadamente cuatro décadas se celebra en Tajonar.
“Estoy muy contento con mi primera titularidad como profesional. Además ha sido en mi casa, Pamplona, que es donde me he criado”, señaló orgulloso Sancet al término del partido del pasado domingo en El Sadar, que concluyó con victoria del Athletic (1-2), a la que el navarro contribuyó con una buena actuación durante los 74 minutos que se mantuvo sobre el terreno de juego y con una gran asistencia a Iñaki Williams para que éste anotara el 0-1 en el minuto 21.
Aunque ya había debutado con el primer equipo del Athletic en la jornada inaugural del campeonato (25 minutos en el 1-0 contra el Barça en San Mamés) y volvió a disponer de otra oportunidad en la octava (otros 25 en el 1-0 contra el Celta en Vigo), lo cierto es que hasta antes del pasado domingo sus aportaciones al equipo de Gaizka Garitano, uno de sus grandes valedores, se habían producido saliendo desde el banquillo. Sin embargo, la lesión de Iker Muniain le abrió las puertas del once inicial del Athletic para un partido que se disputó en El Sadar, estadio en el que, siendo todavía un niño, ya posó con los jugadores del primer equipo de Osasuna. Ocurrió el 15 de enero de 2012, fecha en la que Mendigoiti, colegio campeón del Interescolar, fue invitado al coliseo rojillo para exhibir una copa a la que Oihan Sancet contribuyó con 11 goles y el trofeo de mejor jugador del torneo.
“Habilidad, calidad, potencia, creatividad... Son algunas de las muchas virtudes que posee este jugador que ha maravillado por su trato al balón”. Fueron estos algunos calificativos dedicados a Oihan Sancet en las páginas de este periódico tras su exhibición en el torneo navideño de Tajonar. Pocos días después se produjo la visita de Mendigoiti a El Sadar. Osasuna, que por aquel entonces también competía en Primera, cayó en su feudo (0-2 contra el Racing) y en el banquillo del conjunto navarro, entrenado por José Luis Mendilibar, se sentó Raúl García, que, casualidades de la vida, el pasado domingo compartió titularidad en el Athletic con Oihan Sancet, ese chico que llegó a Lezama siendo cadete y que, tras superar una grave lesión de rodilla el curso pasado, ya está preparado para, en su primer año de sénior, liderar a un equipo al que no le sobra talento.