Pamplona - La salida de Brandon Thomas está a la espera de hacerse oficial. Mientras, en la entidad rojilla esperan que Lillo también salga esta semana para cerrar su capítulo en Osasuna. Con esto, en principio, quedaría resuelto el tema de las marchas en este mercado.

Tras la salida de Perea, oficializada la pasada semana, Osasuna se centra ahora mismo en cerrar las de Brandon y Lillo. La del delantero, primero, está totalmente hecha, pero falta el famoso papeleo y, hasta que no se haga oficial, todo es susceptible de pasar, aunque en principio no ocurrirá nada raro. El Girona se hará cargo de buena parte de la ficha (no de toda) y asumirá una opción de compra obligatoria que ha sido la que ha decantado la balanza para que se llevasen a un jugador que querían otros contendientes de Segunda.

Por otra parte, esta el tema de Lillo. El defensa no cuenta para nada para Jagoba Arrasate. El defensa lleva ya semanas fuera de la dinámica de las convocatorias. Solamente entrena con el equipo y ya. Por eso, para evitar situaciones desagradables y que el jugador pueda encontrar un lugar donde tener posibilidad de disputar minutos, Osasuna quiere cerrar su salida esta semana. Al lateral le queda medio año de contrato y el club no pondrá problemas para que salga sin coste alguno para el equipo que le quiera. - J.G.U.