Pamplona - Ricardo López (Madrid, 1971) no oculta que se llevó una sorpresa enorme y que resultó una gran alegría verse como portero del once ideal de los cien años de Osasuna tras la elección que los aficionados se organizaron en las redes sociales hace unos días. Un cancerbero para la historia de un club no es poco. "Es algo que me ha gustado mucho. Osasuna ha sido el club en el que me he sentido más arraigado, en el que me notado futbolista en el sentido amplio de la palabra. Me formé en el Atlético, estuve en el Valladolid, Manchester, también en el Racing, pero en Osasuna ha sido el club que más he estado y siento orgullo", explica Ricardo desde su domicilio de Pamplona.

"Estuve en Osasuna ocho años y cuando me retiré fue una situación extraña, porque no me dijeron nada desde el club cuando me marché, ni me brindaron la oportunidad de tener una despedida con la gente, fue algo frío", continuó. "Más tarde, cuando venía a los partidos como aficionado, empecé a notar el reconocimiento de la gente, también cuando me encontraba con aficionados por Pamplona. Este ha sido el mayor homenaje que me han podido dar. El Club Atlético Osasuna es lo más que me ha pasado en mi vida. Que te elijan como el portero de la historia de Osasuna es la confirmación de lo que sentía de la gente".

"Me siento muy agradecido y muy contento por este apoyo de los seguidores rojillos", siguió. "Me hace sentirme muy contento y con ganas de seguir trabajando en el fútbol, y también con deseos de volver a Osasuna".

Ricardo no oculta que este es uno de sus objetivos. "Me encantaría volver al club y entrenar a Osasuna. Mi cuartel general está en Pamplona, donde vivo con mi mujer y mis hijos, y qué mejor oportunidad tendría estando aquí. Es algo que no descarto, sería un orgullo para mí. Supondría el punto y seguido en Osasuna después de mi etapa de jugador".

"Mantengo relación con mis antiguos compañeros en Osasuna, tenemos un chat para hablar de vez en cuando y continuar con el contacto", prosigue. "Mi hijo de 17 años se ha hecho acérrimo seguidor de Osasuna, le encanta Chimy Ávila, que es un fenómeno. Yo, por mi parte, sigo el día a día de Osasuna".

El cancerbero madrileño ha ido sumando experiencias como entrenador para volcarlo ahora en un equipo. "Estoy ahora en el juvenil de División de Honor del Valladolid. Hemos hecho una temporada buena, con muy buen ambiente", explica. "Después de salir de Osasuna estuve como entrenador de porteros en el Brujas, más tarde me marché dos años a Japón como entrenador de porteros de la selección -Javier Aguirre era el seleccionador nipón y el pamplonés Juan Iribarren (ahora en el Athletic), el preparador físico-. Estuve después un año en la escuela del Arsenal en Tokio. Decidí que era el momento de regresar y me llegó la oportunidad de entrenar al Racing de Ferrol. Más tarde trabajé en la Federación Española como responsable de los porteros de las selecciones hasta la sub-21".

"Lo dejé hace un año porque a mí me gusta entrenar un equipo, lo tengo muy claro", continúa. "Después d estar en Japón, tuve ofertas para continuar como técnico de porteros en Australia y China, pero las rechacé porque quiero otras cosas".

En Pamplona, mantiene su trabajo de seguimiento con el juvenil del Valladolid, con entrenamientos online y reuniones telemáticas con los jugadores y técnicos, y lleva el confinamiento lo mejor que puede. "Como todo el mundo, estoy viendo mucha televisión, a ver cómo van las cosas. Estoy con mi mujer y dos de mis hijos en casa. Estamos pendientes de mi hija mayor, que está en Estados Unidos estudiando. A ver si puede venir. Ahí ha ido todo un poco más tarde que en Europa, aunque después de lo que pasó en Italia y China, se veía venir que nos iba llegar a todos".

"En casa hago algo de deporte en el jardín. He estado ordenando muchas cosas y, cuando me dejan, hago inventos en la cocina...".

Ricardo termina volviendo al principio, a sentirse estimulado por ser el portero elegido. "En estos momentos en los que todos estamos más sensibles, en los que ves vídeos de hace tiempo o fotografías, todo esto resulta doblemente emotivo. Se me pusieron los pelos de punta cuando Cruchaga me mandó el recorte y me vi en el equipo del siglo, del centenario de Osasuna. Es una satisfacción personal enorme. Lo ven tus hijos y te bromean. Es algo que lo dicen los aficionados y eso tiene mucho valor", concluye.

los datos

El protagonista. Ricardo López Felipe nació en Madrid el 30 de diciembre de 1971. Se formó en el Atlético de Madrid y jugó en el Ávila, Valladolid, Manchester United, Racing y Osasuna. Tiene un título de Liga y un Copa con el Atlético, y una Premier con el Manchester.

En Osasuna. Llegó en la temporada 2005-06 procedente del Manchester y jugó hasta la campaña 2012-13. Disputó 212 encuentros con Osasuna en todas las competiciones.Como técnico. Ha sido entrenador de porteros en el Brujas, dos años con la selección japonesa, fue responsable de la escuela de fútbol del Arsenal en Tokio, ha sido técnico del Racing de Ferrol, responsable de porteros de la Federación Española de fútbol y ahora es el entrenador del equipo de División de Honor juvenil del Valladolid.

Una vez internacional. Internacional en una ocasión, estuvo con la selección española en el Mundial de Corea del Sur/Japón de 2002. En su debut entró sustituyendo a Iker Casillas a diez minutos para el final en un amistoso disputado en 2001 frente a México en el estadio nuevo Colombino de Huelva con Camacho como seleccionador.

"Se me pusieron los pelos de punta cuando me enseñaron el recorte con el equipo"

"Osasuna ha sido el club en el que me he sentido más arraigado, en el que me notado más futbolista"

"Me encantaría volver al club y entrenar a Osasuna, es algo que no descarto, sería el punto y seguido en mi trayectoria aquí"

ricardo lópez

Exportero de Osasuna