Efemérides del Centenario

cinco jornadas para la conclusión de la temporada 96-97 Osasuna asomaba medio cuerpo a Segunda B. Tres entrenadores (Benítez, Zabalza y Sola) no habían conseguido enderezar el rumbo del equipo. La solución de urgencia fue Martín Monreal. El esprint final comenzaba en Badajoz el 10 de mayo. Fiel a su filosofía, el entrenador tiró de la cantera. Para un compromiso tan trascendental -había que ganar o ganar- compuso una alineación con diez canteranos (nueve navarros) más Bolo. La media de edad del equipo era de 21,6 años. Esa tarde debutaba Tiko, un futbolista con ADN rojillo porque sus tíos Mina y Rípodas habían jugado en Osasuna. Tiko marcó el gol de la victoria en el minuto 89. El milagro ya estaba en marcha.