La última experiencia de un partido con público la tuvo Osasuna en El Sadar, en el encuentro frente al Espanyol (1-0), el domingo 8 de marzo. Luego todo se disparó por la pandemia, se cerraron los estadios como lo hizo casi todo, y los estadios se quedaron vacíos. Su última experiencia como visitante con aficionados en las gradas fue curiosamente muy cerca de donde juega este martes, ya que Osasuna visitó el Sánchez Pizjuán y salió trasquilado fatalmente en los instantes finales (3-2) -el partido se jugó el 1 de marzo-.
Osasuna va a vivir esta tarde por fin un partido con algo de jolgorio en las gradas, aunque sea mínimo. La Unión Deportiva Tomares no podía disputar su partido en su emplazamiento habitual, el Municipal de San Sebastián, porque no reúne las condiciones exigidas, y miró a La Cartuja, a una decena de kilómetros de la localidad, para disfrutar de este encuentro histórico.
Los directivos de la UD Tomares querían llevar el mayor número de seguidores al encuentro y, tras las correspondientes negociaciones, alcazaron un acuerdo con los dirigentes del estadio de La Cartuja para que puedan acceder esta tarde al recinto unos 300 aficionados del Tomares con entradas nominativas.
El Tomares, indica ABC de Sevilla, quería que sus futbolistas contaran con el respaldo de seguidores y familiares, llegando a renunciar al dinero de las taquillas para que parte de su afición pueda estar presente en el estadio por un precio de 22 euros cada entrada.
Trescientos aficionados en un recinto para más de 60.000 espectadores va a resultar una gota de agua en el mar, pero un mínimo ambiente proclive a los de casa seguro que habrá.
El estadio de La Cartuja está gestionado por la Sociedad Estadio Olímpico de Sevilla SA, compuesta por la Junta de Andalucía (40%), el Gobierno de España (25%); el Ayuntamiento de Sevilla (19%), la Diputación Provincial (13%) y un 3% repartido entre los dos clubes de fútbol representativos de la ciudad: el Betis y el Sevilla. Precisamente, los aficionados de ambos clubes han hecho un llamamiento en las redes sociales para que haya un recibimiento al Tomares previo al partido y calentar motores para el día histórico.
