En un párrafo

avier Tebas se ha pronunciado tantas veces, y con tanta dureza, contra la Superliga Europea que no cabe duda del miedo que le tiene. Asegura -y en eso tiene razón- que dañaría seriamente a las grandes ligas europeas, y añade -y en eso no la tiene- que además arruinaría a los clubes que participaran en ella. Porque eso último no hay por donde cogerlo: una liga con los grandes del continente tendría audiencias millonarias y los consiguientes beneficios televisivos. Pero es que, además, no todo estaría perdido para el resto de clubes si se puede crear una Segunda y hasta una Tercera División, y debajo de ellas las ligas nacionales. Y los ascensos y descensos de rigor... Hay algo de espíritu aldeano en ese temor a crear un verdadero fútbol europeo. Y mientras, el Bayern, el PSG, el Liverpool o el Real Madrid juegan muchas más veces cada año contra los pelados de sus países que contra los otros grandes del continente. Y eso sí que es tirar el dinero.