Osasuna suele adelantar todo lo posible los deberes y por eso el último día del mercado de fichajes no suele ser una jornada especialmente tensa, aunque suele haber más preocupaciones por los que pudieran llegar a última hora a realizar alguna compra que por una adquisición propia a toda velocidad. El único movimiento fue la adquisición de Javier Ontiveros, cedido por el Villarreal, que ha llegado ante la lesión de Kike Barja. Precisamente la recuperación del canterano, el único jugador lesionado de cierta gravedad los problemas de Moncayola y Budimir tienen menos recorrido en cuanto a tiempo de baja, es la única dificultad que se le plantea de salida a Jagoba Arrasate para gestionar la plantilla de este curso, que contará con 27 jugadores al margen de las incorporaciones que puedan llegar del filial de la mano de los que suelen entrenar con el primer equipo. Es decir, un plantel largo, con mucho donde elegir, con futbolistas que van a tener que asumir un papel secundario e incluso pelear contra un ostracismo posible, de los que se ve venir.

También se puede afirmar que hay un grupo equilibrado, con un claro componente ofensivo que encaja dentro del fútbol ambicioso que se estila, con momentos de salvedad, desde la llegada del entrenador a Osasuna. Varios de los laterales rojillos son profundos y llegadores más que clásicos defensores de su parcela los casos de Nacho Vidal y Manu Sánchez son palpables y Cote también ronda ese perfil centrador, mientras que como centrocampistas figura una legión de tipos felices cuando miran al frente, a la portería rival. Roberto Torres, Kike Barja, Rubén García, Javier Ontiveros, Róber Ibáñez y Javi Martínez son jugadores con indudables condiciones para incidir en los equipos rivales, sin olvidar que Moncayola desencadenado sostenido por los que le cubren las espaldas se ha convertido en un interesante agitador a base de arrancadas y apariciones.

Los delanteros no ofrecen discusión porque responden a su denominación y son hombres para el remate y para el gol, con perfiles distintos y maneras en consecuencia diferentes. Tipos para el remate y la agitación del Chimy podría ser el resumen.

Que Osasuna se prende con su ardor guerrero quizás lo plasme alguna de las estadísticas más llamativas de este inicio de la temporada. Los rojillos, en los tres encuentros que se llevan disputados, han centrado sobre el área de sus rivales en 129 ocasiones, más de 40 veces por encuentro. Un bombardeo de balones puro y duro.

Los 27 de Arrasate conforman una plantilla madura, con experiencia en Primera, en edad ideal, con una media de edad por encima de los 27 años, con Oier como más veterano con 35 años y Manu Sánchez y Javi Martínez como futbolistas más jóvenes 21 años cada uno.