Con el paulatino regreso a la normalidad después de un año y medio de pandemia, se están recuperando tradiciones y eventos que el covid no ha permitido celebrar.

Si hace un mes volvía el público a El Sadar, ayer le tocó el turno a la plantilla de Osasuna de realizar un acto clásico del inicio de temporada: la ofrenda a San Francisco Javier.

Después de completar la tercera sesión de la semana, la plantilla, el cuerpo técnico y la directiva se desplazaron al Castillo de Javier para visitar al patrón de Navarra.

Un acto que se celebró por última vez el 13 de agosto 2019, en vísperas de arrancar la temporada. Por diferentes cuestiones, este año ha tenido lugar entre la cuarta y quinta jornada.

Los capitanes hicieron la ofrenda floral al santo en una misa en la Basílica de Javier que presenció la expedición rojilla y algunas feligresas en la Basílica de Javier