El rendimiento de Osasuna como local en este inicio de curso es más propio de tiempos pretéritos. Y es que los rojillos han enlazado cuatro victorias ligueras, algo que no lograba el conjunto navarro en Primera desde la temporada 2008-09, registro que fue una tónica habitual a finales de los años 80 y principios de los 90 y que, eso sí, es una racha que todavía está muy alejada del récord absoluto, en poder del Osasuna del mexicano Javier Aguirre, ganador de forma consecutiva de los primeros nueve partidos de Liga que aquel equipo disputó en El Sadar en la temporada 2005-06.

Con Vicente Moreno en el banquillo, Osasuna inició la campaña con un empate en Pamplona contra el recién ascendido Leganés (1-1), resultado que no hacia presagiar lo que ha ocurrido después, es decir, los cuatro triunfos consecutivos como anfitriones de los rojillos contra Mallorca (1-0), Celta (3-2), Las Palmas (2-1) y Barcelona (4-2). La marca tiene su dificultad y la prueba es que el conjunto navarro no enlazaba cuatro victorias consecutivas en Liga en la máxima categoría desde la temporada 2007-08, cuando, con José Ángel Ziganda de técnico, ganó de seguido en El Sadar a Athletic (2-0), Zaragoza (1-0), Atlético (3-1) y Almería (2-1).

Otra muestra de que ganar cuatro partidos de Liga seguidos en casa en la máxima categoría no es una tarea sencilla la encontramos en que Osasuna no pudo firmar una racha así ni siquiera durante la exitosa etapa de Jagoba Arrasate como técnico. En cualquier caso, en la campaña 2018-19, la del ascenso y la primera del entrenador de Berriatua en Pamplona, Osasuna no encajó derrota alguna en El Sadar en todo el curso (en Liga, porque en Copa el Reus le apeó al ganar 1-2) y además ganó de forma consecutiva sus últimos 17 partidos en casa, estadística que también incluye uno contra el Reus que no se llegó a disputar porque al cuadro catalán le descalificaron por impagos a sus jugadores a la conclusión de la primera vuelta del campeonato.

Aunque cuatro triunfo seguidos como locales son unos cuantos, el equipo de Vicente Moreno todavía está lejos del récord, en poder del Osasuna del mexicano Javier Aguirre, que en la temporada 2005-06 ganó sus nueve primeros partidos de Liga en El Sadar: 2-1 al Villarreal, 1-0 al Sevilla, 2-0 al Cádiz, 2-0 al Celta, 3-2 al Athletic, 2-0 al Espanyol, 3-2 al Alavés, 1-0 al Mallorca y 2-1 al Atlético.

Otros técnicos que lograron con Osasuna en Primera cuatro victorias ligueras consecutivas en Pamplona fueron Ziganda (en la campaña 2006-07, además de en la 2007-08), el propio Aguirre (en la 2003-04, además de las nueve de la 2005-06), Pedro Mari Zabalza (cinco campañas consecutivas entre 1988 y 1993), Enrique Orizaola (1962-63), Miguel Gual (1961-62) y Sabino Barinaga (1958-59).

Sin embargo, hay registros intermedios entre los cuatro triunfos ligueros y caseros consecutivos en Primera de Vicente Moreno y compañía y los nueve de Aguirre, como los ocho del curso 1983-84 (con Brzic), los siete de 1956-57 (con Baltasar Albéniz), los seis de 1980-81 (con Pepe Alzate) y las cinco de 1982-83 y 1981-82 (también con Alzate), de 1957-58 (con Barinaga) y de 1953-54 (con Tomás Arnanz).