Si la Rotxapea fuera la grada de un estadio de fútbol el nombre de Aurora retumbaría como todo un himno. No hay criatura en el barrio, ni alrededores, a la que le gusten las pipas, chucherías (las congeladas son una delicia), las tartas de gominolas o las colecciones de cromos, que no conozca (y no salude a diario, las normas de la casa empiezan por la educación básica) a Aurora Estabolite, pamplonesa que ha cumplido 25 años (y los que quedan) al frente de Goxoki, una pequeña tienda que hace rincón en el cruce de la calle Bernardino Tirapu con la avenida Marcelo Celayeta de Pamplona.
En Goxoki se cambian cromos a todas horas, entre txikis y mayores, sobre todo de las colecciones de Panini como la de Adrenalyn, y Aurora gestiona más fichajes de Braulio, el director deportivo de Osasuna. Ella guarda cajas y más cajas con las listas de los cromos pendientes y está al tanto de todas las novedades del mercado.
¿Y Unai García, Kike Barka o Arnaiz?
Hace unos días Aurora, que hace unos juegos muy divertidos en su Instagram (@goxokirotxa), se animó a lanzar una campaña para que Panini recapacite sobre las mejoras de su colección. Entre ellas, lo primero a abordar sería cómo es posible que Adrenalyn reúna casi 600 cartas de futbolistas de Primera División, jugadores como Mbappé o Lamine aparezcan en cinco cromos distintos, entre los normales, balones de oro, momentums o ediciones limitadas, y sin embargo otros jugadores, como los rojillos Unai García, Kike Barja, José Arnaiz o Pablo Ibáñez no tengan ni siquiera su carta. La carta de Jorge Herrando apareció al menos hace unos días en una edición limitada al comprar una revista.
Así que Aurora, centrada en el caso del futbolista de Mutilva, que no ha renovado con Osasuna pero cuyo pundonor entusiasma a la grada, se ha animado a impulsar una campaña en redes sociales que lleva por nombre #unacartaparaPablo. Y si idea ha tenido un éxito brutal. En la misma reclama a sus seguidores que escriban a Panini pidiendo que haga justicia con el rubio mediocampista y le haga por fin una carta más que merecida. Y, de paso, recuerde a todos los jugadores de Primera que no tienen su cromo, porque no serán super cracks, pero tienen tanto merito o más que jueguen en la élite.