Osasuna | Soluciones para el drama de la banda derecha

Alessio Lisci atraviesa un auténtico quebradero de cabeza en el costado derecho. En apenas unas semanas, el técnico rojillo ha perdido a sus dos jugadores naturales de la banda: Valentin Rosier e Iker Benito, ambos lesionados de larga duración. La situación ha encendido las alarmas en Tajonar y obliga al entrenador italiano a replantear su plan táctico a contrarreloj.

El club confirmó que Rosier sufre una lesión muscular en el bíceps femoral con afectación tendinosa, lo que lo mantendrá varias semanas fuera de los terrenos de juego. Peor noticia aún es la de Iker Benito, que se rompió el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha y deberá pasar por el quirófano, despidiéndose de la temporada.

La primera opción que baraja el cuerpo técnico pasa por mover piezas dentro de la plantilla. Jon Moncayola aparece como candidato principal para ocupar el lateral o carril derecho. El navarro, acostumbrado a desempeñar varias funciones en el centro del campo, ya ha sido utilizado en esa zona en anteriores ocasiones y ofrece garantías tácticas y físicas. Todo apunta a que será el titular en esa posición durante las próximas semanas, dejando así un hueco libre en el centro del campo que ocupará Aimar Oroz a su vuelta, que está próxima.

Otra posibilidad es adaptar a un extremo o centrocampista ofensivo, como Rubén García o Barja, en esa posición, aunque supondría restar profundidad natural por banda y ahora mismo no parece muy en la mente del italiano. Boyomo puede cubrir bien las espaldas al encargado, pero es que hay que tener en cuenta que el camerunés puede marcharse a la Copa África en poco más de un mes. Otro problema venidero. 

Se mira a Tajonar

Otra vía que se abre ya mismo es dar protagonismo a la cantera. Osasuna siempre ha recurrido a Tajonar en momentos de necesidad, y esta vez podría no ser diferente. Algunos jóvenes del filial podrían empezar a trabajar con el primer equipo en los próximos entrenamientos, con la vista puesta en cubrir convocatorias o incluso minutos en Copa del Rey. El principal nombre que destacan en Tajonar es el Iñigo Arguibide. El canterano ya debutó en 2024, pero en la casa rojilla se valora mucho su evolución y especialmente el desempeño que está teniendo esta temporada. Pese a que no fue al encuentro de Copa, no ha sido convocado con el Promesas para reforzar con urgencia la primera plantilla.

El entrenador italiano se enfrenta así a su primer gran desafío en el banquillo de Osasuna. La pérdida de Rosier y Benito deja una zona del campo huérfana y obliga a reinventar el sistema sin perder solidez defensiva ni profundidad ofensiva.

En un momento clave de la temporada, el carril derecho rojillo se ha convertido en el gran dilema de Lisci, que deberá echar mano de creatividad, cantera y pragmatismo para sostener al equipo hasta que lleguen los refuerzos.