Pamplona. El Gobierno Central ha modificado la regulación referente a la colocación de carteles que publicitan las obras financiadas con los fondos del Plan E (o plan Zapatero) y la ha reducido la exigencia respecto al número de paneles que se deben colocar, debido al alto coste que de cada uno de ellos supone, y que el año pasado se comió parte importante de los fondos destinados al empleo y la sostenibilidad local. Mientras que en 2009 se exigía que cada obra o intervención fuera acompañada de un panel de unas características concretas, en este nuevo plan de 2010 sólo es necesario señalizar con la publicidad estatal la obra que suponga una mayor inversión por cada municipio. Esto supone un ahorro importante ya que el precio de cada cartel oscila entre los 1.000 y los 3.000 euros y, aunque muchas veces el precio está incluido dentro del de licitación, son los Ayuntamientos los que pierden ese dinero para hacer otras inversiones.
Este cambio es importante para todos pero es especialmente significativo para los pequeños municipios o aquellos que se dividen en diferentes concejos y que, además de recibir unas partidas no muy elevadas, tienen que repartirlas para realizar intervenciones en los diferentes núcleos de población. En la Cuenca de Pamplona son varios los municipios que están en esta situación (Galar, Cendea de Cizur, Cendea Berrioplano, Ezkabarte, Aranguren, Egüés, valle de Elorz, Cendea de Olza, Esteríbar, Ollo e Iza)y, la mayoría, han agradecido el cambio. "Es un cambio que había que hacer, es justo porque lo del año pasado fue una vergüenza, tuvimos que poner paneles para cada intervención y fue un desembolso importante", apuntó Miguel Elizari, el alcade de Noáin (valle de Elorz). La tendencia general este año, además, ha sido la de reciclar los paneles que se utilizaron el año pasado, sustituyendo los vinilos (pegatinas) por unos nuevos, como aconseja el decreto. En el Ayuntamiento de Cizur Menor lo tenían claro. "El año pasado compramos dos y este año uno lo hemos usado para anunciar la obra de más cantidad cambiándole la pegatina y otro lo aprovechamos para anunciar otra cosa. Hay que amortizarlos porque cada cartel costó 1.000 euros, más 700 de la colocación (cimentación de un m3 para poner la base), y es una cantidad grande que no se puede desaprovechar".
También en la mayoría de municipios se han realizado menos intervenciones pero de mayor calado que en la edición pasada. Claro ejemplo de ello son las localidades de Berrioplano o Galar. En Berrioplano han dedicado la partida íntegra que le fue otorgada a la rehabilitación del palacio de Berriosuso y en Galar han destinado todo el fondo a la rehabilitación de las piscinas.