La reciente decisión del alcalde de Pamplona Enrique Maya de romper unilateralmente el acuerdo alcanzado hace un año con el Gobierno de Navarra para la promoción de vivienda protegida ha provocado los debates más intensos en el Pleno ordinario celebrado este miércoles, el penúltimo que queda en la legislatura.

Para la mayoría que representan EH Bildu, PSN y Geroa Bai, la venta de las parcelas municipales a promotores privados, frente a la posibilidad de que fuera un proyecto gestionado desde las instituciones públicas, demuestra la falta de compromiso de UPN con la vivienda social protegida y pone en duda su gestión.

Que Maya haya asegurado que el dinero obtenido de la subasta de estos terrenos, 23,8 millones de euros, se destinará a financiar proyectos comprometidos por la falta de presupuesto, como el civivox del Ensanche o el polideportivo de Buztintxuri, y para contener el endeudamiento del Ayuntamiento es como reconocer que no ha hecho muy bien las cosas.

Así cualquiera cuadra las cuentas, le han venido a decir al alcalde los grupos de la oposición, preocupados por el vaciado del patrimonio municipal que supone la subasta de una veintena de parcelas y las repercusiones financiera para la corporación resultante de las elecciones del próximo 28 de mayo.

Dos propuestas

En el Pleno de este miércoles se han debatido dos iniciativas por esta cuestión, una firmada por EH Bildu y Geroa Bai y la otra por el PSN, en ambos casos para denunciar la decisión del equipo de Gobierno por lo que supone de dejar de atender la demanda de vivienda pública protegida en Pamplona.

Las dos propuestas han sido aprobadas con los votos de las tres formaciones proponentes, mientras que Navarra Suma ha votado en contra.

El concejal de EH Bildu Borja Izaguirre ha acusado al alcalde de utilizar la política de vivienda en su estrategia de confrontación con el Gobierno de Navarra y de abandonar a los ciudadanos con necesidades.

Ha lamentado que Maya haya dejado a Pamplona fuera del convenio del que forman parte 14 municipios navarros, que ceden parcelas a Nasuvinsa para construir en ellas viviendas públicas de alquiler y de alta eficiencia energética.

Vaciado del patrimonio

“Son los políticos de la mentira. No han permitido construir ni una vivienda social y ahora que se van venden las parcelas municipales. Se van a ir dejando las arcas como unos zorros” ha comentado el concejal aberztale.

Por parte del PSN, Xabier Sagardoy ha lamentado que el Ayuntamiento rompiera de forma unilateral el convenio con Nasuvinsa dadas las necesidades de vivienda pública, sobre todo entre la gente joven.

“Ha sido un despropósito. Pamplona pierde con decisiones como ésta. Han dilatado los tiempos para finalmente romper las negociaciones y no firmar el convenio”.

El portavoz socialista ha señalado sobre la venta de los terrenos que “hipoteca el margen del Ayuntamiento. Dejan al Ayuntamiento seco. Llevamos toda la legislatura con la vivienda protegida y termina sin hacer nada. Nunca ha sido una prioridad”.

Por parte de Geroa Bai, JavierLeoz ha comentado que el convenio con Nasuvinsa habría permitido construir más viviendas sociales que con la venta de solares a promotores privados . “No creyeron en el acuerdo con Nasuvinsa desde el principio. Ha decidido vender todo el suelo y ponerlo en manos privadas y para que esto no sea un escándalo mayúsculo han hecho un mix con VPO”.

El representante de Geroa Bai también se ha referido al efecto que tendrá venta de las parcelas en la próxima legislatura: “Se ha cargado de un plumazo el patrimonio municipal y si en diciembre aumentaron la deuda en 15 millones, ahora se van vendiendo 24”.

Por parte del equipo de Gobierno ha intervenido el concejal delegado de Urbanismo Juan José Echeverría, que ha culpado al consejero José María Aierdi de la ruptura del convenio.

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Ha empleado buena parte de su intervención en explicar las diferencias de interpretación del acuerdo con Nasuvinsa y ha defendido su propuesta, con la subasta de una veintena de parcelas en Arrosadía-Sadar, Buztintxuri, Etxabakoitz Norte y Txantrea.

De las 635 viviendas estimadas por el Ayuntamiento, 304 serán viviendas protegidas. De éstas, 104 serán en régimen de alquiler, varias para alquiler joven y otras para mayores de 60 años.