El Ayuntamiento de Pamplona ha celebrado este jueves el último Pleno ordinario de la legislatura, que ha servido para hacer balance de estos 4 años y de despedida para muchos de los actuales representantes municipales, entre ellos el alcalde Maya, la socialista Maite Esporrín y el portavoz de Geroa Bai Patxi Leuza.

La sesión se ha celebrado sin la presencia de los dos exconcejales de UPN que se han pasado a la candidatura del PP, María García-Barberena y Fermín Alonso, que tampoco han aparecido por la sesión fotográfica a la que habían sido citados los 27 corporativos para el habitual retrato de grupo en la despedida de la legislatura. 

Lejos del buen ambiente que suelen presidir los finales de mandato, el Pleno de este jueves ha estado caliente, con tensas intervenciones donde los portavoces, mirando de reojo a la campaña electoral que está a punto de comenzar, han aprovechado para sacar a relucir los proyectos más controvertidos de estos 4 años o sacar pecho.

Maya, después de dos legislaturas como alcalde y otra en la oposición, ha tenido una despedida agridulce. En realidad, ha sido así desde que rompió el pacto presupuestario con el PSN y tuvo que gobernar en minoría, lo que ha condicionado la gestión municipal.

En la sesión de este viernes ha sido el centro de todas las críticas y le ha tocado intervenir en el debate abierto sobre la pasarela del Labrit tras una iniciativa presentada por EH Bildu.

Debate sobre el gasto de la pasarela

Como el concejal Alonso no estaba presente en la sesión, le ha tocado al alcalde responder a la dura intervención de Joseba Asiron sobre el gasto originado por el arreglo de la dichosa pasarela, por encima de 1,4 millones de euros.

El portavoz abertzale ha criticado al equipo de Gobierno por “despilfarrar el dinero de la ciudad con tal de no acepta una derrota política” y marcharse dejando a la ciudad “empantanada” y ha anunciado que pondrán en marcha una “exhaustiva auditoría sobre todo el expediente de la pasarela del Labrit” que “delimite las responsabilidades por el dinero que no se recupere”.

El alcalde Maya ha referido que, si les hubiesen hecho caso, “en este momento no habría pasarela” porque reclamaban solo 800.000 euros, ha asegurado que su reclamación no habría salido adelante porque no se podría peritar la pasarela debido al derribo y ha considerado que Asirón “lo que no soporta es que la gente esté usándola”.

En su última intervención como concejal Maite Esporrín ha dicho sobre el arreglo que “ha sido una chapuza en la gestión y un derroche de dinero público” con una desviación del presupuesto para la reparación “tremenda”, al igual que el incremento del tiempo. Asimismo ha considerado que no pueden asegurar que se repondrá la totalidad del gasto que el Ayuntamiento ha invertido en su reparación.

Desde Geroa Bai, Javier Leoz ha recordado que la pasarela “estaba en mal estado e incumplía la legislación desde el inicio”, ha criticado que no quisieran estudiar si merecía la pena la reparación y ha aclarado que, si se hubiese hecho el desmantelamiento, “se iba a ir certificando cómo estaba” para poder justificarlo de cara a una futura reclamación.

El debate se ha enredado en un cruce de acusaciones y se ha ampliado a otros asuntos, con alusiones a los sonoros fracasos de Navarra Suma en la reforma del paseo de Sarasate o los cambios en el tráfico de la calle Amaya e iniciativas tan cuestionadas como las barras en la Plaza del Castillo el concurso de hípica en la Ciudadela o la bandera XXL en la Plaza de los Fueros.

Por si no fuera poco, también ha salido a relucir durante la sesión plenaria el fallido proyecto de restauración de la presa de Santa Engracia, que la Confederación Hidrográfica del Ebro sigue sin autorizar.

Presa de Santa Engracia en la Rochapea. Iñaki Porto

Al menos, el Ayuntamiento ha conseguido aprobar por unanimidad las líneas maestras que marcarán las actuaciones en los entornos de los ríos Arga, Sadar y Elorz en los próximos años, a través de un documento de planificación fluvial.

Intervenciones en el parque fluvial del Arga

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El documento servirá de hoja de ruta para potenciar los valores naturales y urbanos de estos espacios, mejorando su integración en los barrios por los que discurren y corrigiendo los impactos negativos que ahora existen. En él se recogen distintas actuaciones, que se realizarán en función de la disposición presupuestaria y que incluyen, entre otras, iniciativas subvencionadas con fondos europeos Next Generation dentro del proyecto RUNA 2025.

El documento servirá de hoja de ruta para potenciar los valores naturales y urbanos de estos espacios ya que recoge una serie de actuaciones. En concreto, en el parque fluvial del Arga se prevé mejorar la regata existente en Beloso Bajo, junto a la Ciudad Deportiva Amaya; la eliminación del cruce aéreo de alta tensión junto al molino de Caparroso; la atenuación de inundaciones en Rochapea, mediante limpiezas y gestión del riesgo o la creación de una reserva fluvial junto al molino de Ilundáin.