Navarra va a necesitar 149 nuevos agentes de Policía Foral para prestar el servicio de Tráfico y Seguridad Vial en exclusiva. Será una proceso progresivo de cinco años en el que se habilitará una pasarela para que los agentes de la Guardia Civil de Tráfico que lo deseen puedan cambiar de cuerpo. Lo harán en las mismas condiciones económicas que tienen ahora, incluido el plus de peligrosidad que tienen asignado desde 1981.
Los guardias civiles, al igual que los miembros de la Policía Nacional que ejercen en Navarra, reciben un complemento económico de 744 euros brutos al mes. Disponen además de un mes de vacaciones más al año que sus compañeros en otras comunidades. Este plus, que se aplicaba como compensación por el riesgo de ser víctimas de ETA, se mantiene pese la desaparición de la banda armada. Muchos agentes disponen además de vivienda gratuita en el propio cuartel.
Según recogen los presupuestos de Navarra para este año, al personal que se integre en la Administración Foral como consecuencia de un traspaso de competencias "se le respetará la suma de las retribuciones básicas y complementarias que venía percibiendo". De esta forma, los guardias civiles que decidan pasar a la Policía Foral, si actualmente cobran más de lo que les correspondería por el nuevo puesto, "se les asignará un complemento compensatorio por la diferencia". Esta compensación "será absorbida con cualquier incremento que se produzca en sus retribuciones en años posteriores".
En cualquier caso, los guardias civiles de tráfico que deseen seguir en Navarra podrán pedir también una reubicación en el propio cuerpo en la Comunidad Foral.
