Navarra reeditará su Gobierno plural y progresista. PSN, Geroa Bai y Contigo-Zurekin cerraron ayer los últimos detalles de un acuerdo que encarrila la investidura de María Chivite, que previsiblemente tendrá lugar este fin de semana. Queda pendiente la abstención –o el voto a favor– de EH Bildu, pero la formación soberanista ya avanzó que no iba a obstaculizar el camino al nuevo Gobierno foral.
Es el punto final de un largo proceso de negociación que ha estado marcado primero por las elecciones generales del pasado 23 de julio, y por un cruce de propuestas y reproches después que por momentos ha podido hacer descarrilar toda la operación. Finalmente no ha sido así. Pese a las desconfianzas internas que deja la negociación, Chivite tiene ya garantizada investidura. Será la primera en repetir mandato desde Miguel Sanz.
El nuevo Gobierno tendrá una estructura similar al anterior. Lo que no deja de ser sorprendente tras una negociación que se ha prolongado durante más de dos meses. El PSN mantiene la presidencia y ocho departamentos. Entre ellos Economía y Hacienda, Educación, Justicia e Interior, Cultura y Deporte, Derechos Sociales o Función Pública, además de la portavocía.
Geroa Bai por su parte repite en tres de los cuatro departamentos que tenía hasta ahora: desarrollo Económico, Desarrollo Rural y Medio Ambiente y Relaciones Ciudadanas. Este último engloba las áreas de Euskera, Acción Exterior y Paz y Convivencia, aunque en esta dirección general sigue en manos de PSN.
PSN, Geroa Bai y Contigo presentan hoy los detalles de un acuerdo de Gobierno continuista que repite un esquema similar al anterior
La coalición de Uxue Barkos asume además la gestión del departamento de Salud. Un área difícil y que viene marcada por unas consecuencias de la pandemia que han lastrado la situación sanitaria, fundamenta en lo que se refiere a la atención primera, y que asoma como uno de los retos en la nueva legislatura. Geroa Bai tendrá además la vicepresidencia segunda y se garantiza el apoyo de sus dos socios para la elección del senador autonómico.
La coalición pierde en cambio el departamento de Vivienda, cuya gestión pasa a Contigo-Zurekin. Una reclamación prioritaria para la formación de Podemos, IU y Batzarre, que suma también el área de Juventud para su única cartera, desde la que apuesta por poner en marcha los últimos cambios aprobados en la Ley de Vivienda estatal.
Los detalles en cualquier caso serán presentados hoy martes por las representantes de los tres partidos, Uxue Barkos (Geroa Bai), Begoña Alfaro (Contigo) y la propia María Chivite (PSN), que no ha querido participar en el proceso negociador. Previamente los tres grupos tienen previsto reunirse en el Parlamento para dar un último repaso a la redacción del acuerdo que les compromete a la colaboración institucional para los próximos cuatro años.
Tensión negociadora
El acuerdo no ha sido nada sencillo, y eso que los tres partidos venían ya de gobernar juntos y habían mostrado su voluntad repetir cuatro años más. O quizás por eso ha sido más difícil. Porque las desconfianzas generadas esta última legislatura habían puesto a la defensiva a los tres partidos, que no han acelerado la negociación hasta la última semana.
Los socialistas, que desde el principio habían mostrado su intención de revisar la estructura del Gabinete, finalmente han accedido a mantener la representación de Geroa Bai aunque revisando algunas competencias. Un punto que finalmente ha permitido un acuerdo que se resolvió ayer tras un jornada doble de negociación. Primero internamente dentro de Geroa Bai para presentar una contraoferta al último planteamiento del PSN. Y finalmente una reunión a tres que dio comienzo a las cinco y finalizó pasadas las diez con una comparecencia pública que evidenciaba caras de cansancio y en la que se evitaron los detalles.
Pero que despeja el camino para la investidura de Chivite, que tras quedar de lado en las negociaciones tiene el reto ahora de dar cohesión a un Gobierno que llega, para bien y para mal, con la experiencia acumulada de estos cuatro años. Y que deberá restaurar heridas si no quiere caer en la dinámica de desconfianza e inestabilidad que han protagonizado todo el proceso de negociación.
Cinco horas de negociación
Toda la tarde. PSN, Geroa Bai y Contigo-Zurekin se habían citado a las cinco de la tarde para tratar de cerrar el acuerdo de Gobierno. La propuesta socialista de la semana pasada había acercado un consenso sobre la estructura del nuevo Gabinete, pero había cosas que Geroa Bai quería revisar. La coalición de Uxue Barkos logró sumar ayer a sus competencias las actuaciones relacionadas con el Cener y con el Polo de la Innovación. La cita en cualquier caso se centró fundamentalmente en concretar algunos puntos del acuerdo programático que habían quedado sin cerrar, así como en definir aquellos desacuerdos que el nuevo Gobierno deberá tratar de gestionar desde el consenso. O, al menos, desde el respecto a unas posturas diferenciadas que asoman ya. Para ello se ha habilitado también un mecanismo de control interno que pretende servir de árbitro en el marco de un acuerdo programático que ahora toca poner en marcha.