El rapero José Miguel Arenas Beltrán, más conocido como Valtònyc, condenado hoy a dos años de prisión por incitar durante un concierto a "matar a un guardia civil", en una sentencia de conformidad acordada entre las partes, ha reaccionado en sus redes sociales al juicio que hoy ha protagonizado, asegurando que "la libertad es un extraño viaje".

En la red X, Valtònyc ha publicado ese mensaje en catalán: 'La llibertat és un estrany viatge', tras no hacer declaraciones esta mañana a la salida de los juzgados en Sevilla, pero sí comparecer ante su abogada, Isabel Elbal.

El rapero no ha reaccionado a su comparecencia judicial por la misma vía aparte de la citada frase, aunque anoche público en Instagram la fotografía de una mujer bailando flamenco en la calle Antonio el Bailarín de Sevilla, a escasos metros de la sala donde ha sido juzgado.

En el juicio, Valtònyc ha reconocido los hechos, ha pedido disculpas y ha aceptado la pena de dos años de prisión más el pago de las costas, aunque -a falta de ratificarlo el juez- no irá a la cárcel, según ha dicho el magistrado, que ha aclarado tiene que estudiar en profundidad todas las peticiones de las partes, después de que el propio acusado se lo preguntara antes de aceptar la condena.

"¿Me asegura que después de este juicio no iré a la cárcel?", ha inquirido el rapero, a lo que el juez ha respondido que habrá que estudiar las peticiones de todas las partes y, teniendo en cuenta su arrepentimiento, se emitirá un auto que, previsiblemente, le excluya de ir a prisión.

"Pido disculpas por lo que dije"

En el alegato de defensa que le ha concedido la sala, Valtònyc, visiblemente nervioso y preocupado, ha admitido: "Es verdad que las palabras que dije son de mal gusto, desagradables", y "en ese contexto", ha dicho entender "que hicieran sentir mal a alguien, que molestaran".

"Pido disculpas por lo que dije", ha enfatizado el rapero balear, mientras la Fiscalía ha argumentado que "se muestra arrepentido" a la hora de negociar un acuerdo, y su abogada, Isabel Elbal, ha pedido que se suspenda la condena para que no tenga que entrar en prisión.

El juez ha aclarado que, inicialmente, se dicta sentencia y se resuelve "en resolución aparte" sobre la suspensión de la pena de entrada en prisión, lo que comunicará en un auto que se emitirá en los próximos días.

El magistrado ha preguntado al acusado si estaba de acuerdo y le ha recordado que la conformidad a la que se llegue no se podrá recurrir, a lo que el músico ha contestado preguntando al magistrado si debía entender que la acusación se reducía a las amenazas de muerte y no a terrorismo, lo que ha sido aseverado por la sala.

Finalmente, ha sido condenado por un delito de amenazas graves a colectivo, concurriendo el agravante de reincidencia y la atenuante de arrepentimiento.

Inicialmente, la Fiscalía y la acusación particular pedían para él cuatro años de cárcel y una multa de 10 euros al día durante 12 meses por incitar a "matar a un guardia civil" en un concierto celebrado el 31 de marzo de 2018 en la localidad sevillana de Marinaleda.