Navarra está en la senda de eliminar su deuda pública. Lo dice la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) en su último informe de seguimiento del Plan Fiscal y Estructural de Medio Plazo 2025-28, en el que prevé que la Comunidad Foral llegue a 2029 con un superávit del 1,8% del PIB. Añade que la ratio de su deuda pública sobre PIB descenderá progresivamente hasta el 1% y que incluso “podría llegar a desaparecer a finales de esta década”.
El pasado 31 de diciembre, Navarra tenía una deuda de 2.745,5 millones de euros (el 10,3% de su PIB).
En un análisis más detallado, la AIReF estima que el gasto computable crecerá en Navarra un 7% en 2025, un 4,8 % en 2026, por encima de la tasa de referencia del 3,3%; mientras en 2027 aumentará un 3,8% y estará más cerca del límite actual del 3,4%.
Para 2025, espera un ligero aumento del superávit registrado en 2024 por diversos factores, como los empleos excepcionales registrados por la imputación del efecto de las devoluciones a mutualistas en el IRPF de años anteriores.
Por otro lado, la evolución esperada en los ingresos tributarios y el registro de los nuevos impuestos compensan el impacto de las medidas de rebaja fiscal adoptadas por la comunidad en el IRPF, la reducción de las transferencias del Estado por la desaparición de los gravámenes temporales vigentes hasta 2024 y el incremento de la aportación al Estado bajo el supuesto de que no se prorroga la del año anterior (como sí ocurrió en 2024).
Superávit al alza
Se prevé que el superávit del 1,1% del PIB aumentará paulatinamente en los años siguientes hasta alcanzar el 1,8% en 2029. Los principales cambios en las previsiones a medio plazo de la AIReF para Navarra se derivan del positivo cierre de 2024, año que tuvo un saldo favorable en más de un punto al estimado por la AIReF en el informe de líneas fundamentales de presupuestos 2025. La mejora se ha trasladado en parte a las estimaciones de medio plazo, que recogen también el impacto de las medidas de rebaja fiscal, la revisión del escenario macroeconómico, y la actualización del perfil y cuantía de los ingresos derivados de fondos europeos tradicionales.
La AIReF considera que los recursos de Navarra, sin tener en cuenta los fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), alcanzarán un peso del 23,9% del PIB al final del periodo. Se trata de seis décimas de PIB superior al nivel alcanzado en 2024.
Su proyección revela que los principales impuestos de la comunidad crecerán en promedio un 5,1% en el periodo 2025-2029, alcanzando el 20,5% del PIB en 2029. Este nivel es superior en 12 décimas de PIB al del cierre de 2024.
Mientras que los ingresos procedentes del IVA se espera que crezcan en promedio por encima del 4% anual durante el periodo considerado, los impuestos sobre la renta aumentarán a un ritmo promedio anual superior al 5%. El resto de los recursos reducirá su peso en el PIB hasta alcanzar el 2,9% del PIB en 2029.
También estima que los empleos, sin considerar los financiados por el PRTR, alcanzarán el 22,1% del PIB en 2029, condicionados en el medio plazo por la evolución del gasto asociado al envejecimiento de la población, y de la aportación al Estado y el retorno de las reglas fiscales.