bahamas - El neozelandés William Trubridge volvió a dejar sin respiración al mundo entero. El buceador estableció un récord mundial al batir el suyo propio. Trubridge cogió aire, se sumergió a 122 metros de profundidad en un agujero azul en las Bahamas y salió del agua cuatro minutos y 24 segundos después. El neozelandés superó su propio récord, establecido a 121 metros de profundidad. “Era un hermoso descenso, todo fue bien”, afirmó en un vídeo publicado por la compañía de buceo Trubridge. Sin embargo, a pesar de su éxito en el momento de sumergirse, el neozelandés reconoció dificultades en el ascenso, que definió como “terrible”. Decenas de espectadores estallaron en aplausos cuando vieron a Trubridge alcanzar la superficie y coger aire fuera del agua. Además, era la primera vez que el padre de Trubridge acudía a ver a su hijo intentar conseguir un récord mundial.
