san sebastián. La muerte de Asier Lavandera, de 21 años, ha dejado una profunda herida en el barrio donostiarra de Altza, donde sus padres regentan desde hace una década el Bar El Quijote, situado en el número 3 de la calle Txapinene.
La noticia se extendió en la zona en torno al mediodía, y causó una gran conmoción entre los vecinos de este populoso barrio donostiarra. Más aún por las circunstancias en las que ocurrió el fallecimiento del joven, durante una supuesta pelea en la discoteca navarra de Mao Mao Beach.
El establecimiento de los padres, no obstante, permaneció durante toda la jornada cerrado con un cartel colgado en el que se leía el motivo del cierre. Fue un duro golpe para la familia, puesto que Asier era el único hijo del matrimonio formado por Manuel Lavandera, Manolo como le conocían en el barrio, y María Nieves La Granja, quienes viven en el barrio de Intxaurrondo.
Asier nació en Donostia el 8 de agosto de 1988. Cursó sus estudios en el Colegio San Ignacio de Loyola, en el barrio donostiarra de Gros. Durante esos años estuvo también jugando a fútbol en el equipo del centro escolar hasta, aproximadamente, los 16 años. Al parecer, según recuerdan algunos compañeros de su clase, no era muy buen estudiante, ya que tras repetir un curso abandonó las clases antes de concluir la Enseñanza Obligatoria.
La verdad es que la vida ya le dio algún buen susto a este joven donostiarra, puesto que, mientras estuvo trabajando como repartidor, sufrió un grave accidente de motocicleta en el que se partió ambas piernas, según recuerda un compañero. Sin embargo, salió adelante e incluso retomó sus estudios, ya que hizo un curso a través de la escuela de Formación Profesional y Aprendizaje Permanente Cebanc.
De todos modos, ahora estaba trabajando en el ámbito de la cocina. Según se prevé, su cadáver será trasladado hoy desde Pamplona al tanatorio de la Funeraria Vascongada, en Errekalde (Añorga).