pamplona. Estancos, quioscos y gasolineras se convirtieron ayer en puntos de venta de los nuevos juegos de la ONCE, que fueron presentados en una rueda de prensa por Matilde Gómez Casas, delegada territorial de la organización en Navarra, a la que acompañó Juan Carlos Andueza, jefe del Departamento de Juego de la Comunidad Foral.

Los nuevos juegos activos y rascas se encuentran ya a la venta en estos establecimientos, aunque los tradicionales cupones seguirán a disposición del público únicamente a través de los 21.000 trabajadores con discapacidad con los que la organización cuenta en todo el Estado.

labor social Según afirmó ayer Gómez Casas, esta estrategia responde a "tres objetivos claros: aumentar la visibilidad de los nuevos productos de la ONCE, ofrecer mayores posibilidades en lo que respecta a puntos de venta y horarios ,y llegar hasta los clientes que ahora mismo no están comprando nuestros productos". La delegada territorial de la organización también destacó que "se va a garantizar el juego responsable, y la recaudación está destinada a la labor social, especialmente al impulso del empleo y la educación para personas con discapacidad". Esto significa, como apuntaron desde la ONCE, que la labor social será el fin del 100% de lo recaudado con los rascas y juegos activos, que cuestan entre 50 céntimos y 3 euros, y pueden estar premiados con cantidades que van desde el reintegro del importe hasta los 100.000 euros.

De momento, en la Comunidad Foral existen en total 82 puntos de venta (el número asciende a 5.000 en todo el Estado), aunque Gómez Casas afirmó que esta cantidad irá aumentando: "En función de cómo haya sido la demanda, también será mayor el número de establecimientos".

El lanzamiento de estos productos ha venido precedido por una campaña publicitaria en varios medios de comunicación. De momento, en la Comunidad Foral una persona ya resultó ayer agraciada con un premio de 7.500 euros en uno de los nuevos juegos.