Un centro abierto a la sociedad en la que vive, con su vertiente europea, pero sin olvidar su principal misión: potenciar el euskera y la cultura propia. Este es el objetivo de la ikastola San Fermin, centro que el mes pasado recibió la visita de 14 alumnos de entre 15 y 18 años y dos profesores del colegio Heilig-Hartcollege de Waregem (Bélgica). Este grupo trabajó junto a alumnos y docentes de la ikastola de Cizur Menor actividades relacionadas con la alimentación y la cultura. Los participantes realizaron una comparativa sobre los menús escolares en ambos centros, analizaron recetas tradicionales y entrevistaron a varios cocineros navarros.
Esta iniciativa se enmarca en un proyecto europeo de calado en el que se embarcó la ikastola San Fermin hace siete años y en el que en la actualidad participan siete centros europeos (dos noruegos, uno finlandés, uno de Normandía, uno turco, el belga y la ikastola). "Comenzamos a movernos en 2002 y un año después iniciamos una red de socios. Con el centro finlandés llevamos trabajando desde el principio", explica la directora de la ikastola San Fermin, Pilar Vicente. Al principio, los proyectos eran trianuales y ahora son de dos años. "En el primero, analizamos las lenguas minoritarias y el bilingüismo, después el bienestar y otros aspectos sociales y ahora estamos con el tema de la alimentación y la salud", prosigue Vicente.
Representantes de los siete centros se reunieron el pasado septiembre en Turquía para plantear los proyectos para este curso. "Esta iniciativa es mucho más que un intercambio de familias, se implican dos o tres profesores de cada centro que coordinan el proyecto y deciden qué actividades realizar y en qué asignaturas. Tiene un planteamiento curricular", asegura Vicente, que añade que "es una experiencia muy interesante y que cada vez toma mayor dimensión. Las familias están encantadas y los alumnos mejoran su nivel de inglés y conocen otras culturas. Es muy enriquecedor".
estancia en pamplona
Análisis a los menús escolares y las recetas de cocina
En esta ocasión se desplazaron hasta Pamplona 14 alumnos de Flandes, que se alojaron en otras tantas familias y asistieron a actividades en la ikastola. La gran mayoría guardaron relación con la alimentación y los hábitos culturales. "Analizaron los menús escolares de la ikastola para compararlos con los suyos, entrevistaron a varios cocineros y han estudiado recetas tradicionales para ver si son saludables", explica Igor Tolosa, coordinador de proyectos europeos de la ikastola, que añade que "queremos aprovechar el proyecto para incidir en la importancia de inculcar una buena alimentación en los escolares".
En este sentido, los profesores Johan Vancawemberghe y Tony kerkhove afirmaron que "nos ha sorprendido gratamente la importancia, el cuidado y el interés de la gente por la cultura gastronómica", ya que la cocina belga, flamenca, no es conocida a nivel mundial. En este sentido, estos docentes descubrieron, tras las visitas que han realizado a Mendavia y Lodosa "una forma de hacer economía diferente, en el que la agricultura no es un sector a desaparecer, sino que es un pilar importante de la economía de la zona".
Los alumnos navarros viajarán en marzo a Waregem y en enero se celebrará una reunión en la ikastola en la que participarán delegados de los siete centros para hablar de futuro.