pamplona. El jefe de la Policía Local de Zizur Mayor, Pablo Salvatierra, aseguró ayer que la plantilla está "cansada y desmotivada" por los hechos que culminaron con la agresión sufrida por un compañero el pasado domingo, a la conclusión de los conciertos del Hatortxu Rock. En ese sentido, criticó la autorización para la celebración del citado festival, porque "se nos pone a los policías a los pies de los caballos".

"Sentimos que los colectivos que organizan estos conciertos gozan de total impunidad y hacen lo que les da la gana. Yo le diría al alcalde que no vuelva a autorizar más conciertos de este tipo", dijo Salvatierra, quien indicó que el policía agredido deberá estar dos meses inmovilizado para recuperarse de la rotura de peroné y de ligamentos que sufrió al ser pateado por un joven. Este agente fue intervenido quirúrgicamente el domingo, horas después de la agresión y se recupera favorablemente.

Por su parte, el autor de la patada, J.L.A.B., de 26 años y vecino de Pamplona, quedó ayer en libertad acusado de un delito de atentado contra agente de la autoridad. El joven fue detenido por agentes municipales, aunque finalmente fue la Guardia Civil la que se hizo cargo de las diligencias.

Al hilo de estos hechos, el alcalde de Zizur Mayor, Pedro Huarte, aseguró ayer que "la Policía no había emitido ningún informe contrario a la celebración del concierto" y resaltó que "en las once ediciones anteriores del festival no se habían producido incidentes", al tiempo que evitó valorar las declaraciones realizadas por el jefe de la Policía Local. "Ellos son profesionales y desde el Ayuntamiento y el equipo de gobierno se les va a dar todo el apoyo necesario y se va a poner a su disposición todos los recursos que requieran para realizar su trabajo en las mejores condiciones".

Huarte volvió a condenar de manera "firme y rotunda" la agresión sufrida por el policía municipal y reiteró su apoyo "no sólo a él, sino a todo el cuerpo de Policía Local por el gran trabajo que realizan día a día". "Lo que sucedió después del concierto, para nada puede empañar el gran festival que se vio, porque fue una oportunidad única para que los jóvenes de Zizur pudieran ver una música que normalmente no pueden ver y que, en cualquier caso, la organización del Hartotxu ha sido en todo momento ejemplar y no creemos que un comportamiento individual deba empañar el festival en sí", añadió.

Por su parte, el grupo de UPN en el Ayuntamiento de Zizur Mayor censuró la agresión y defendió que "es inadmisible la celebración de un concierto a favor de los presos de ETA". A través de un comunicado, los regionalistas criticaron las declaraciones realizadas por el alcalde, al igual que hizo el PPN en otra nota.