PAMPLONA. Las previsiones de fuertes recortes en la financiación pública para 2013 han llevado a Medicus Mundi Navarra a tener que ajustar drásticamente sus proyectos de cooperación en salud comunitaria para el próximo año, denunció la ONGD.
Este ajuste afectará a cerca de un millón de personas en África y Latinoamérica, que verán más limitado todavía su acceso a la salud. Los fondos procedentes de las instituciones públicas que gestiona esta ONGD serán, previsiblemente, un 46% inferiores a los manejados en 2012. Mientras que durante este año se han impulsado 22 iniciativas con una población beneficiaria de 2,2 millones de personas, la planificación para 2013 plantea sólo 11 proyectos para 1 millón de personas, es decir, la mitad que en la actualidad.
Por ello la ONGD hace un llamamiento a las instituciones y a la sociedad civil para reforzar su compromiso con la solidaridad internacional y evitar un retroceso irreversible en el trabajo realizado en medio siglo de cooperación. Desde la organización explican que se ha tenido que priorizar proyectos y que a pesar de que se ha logrado garantizar la presencia en los ocho países donde se trabaja actualmente (Bolivia, Perú, Nicaragua y Guatemala en América; y Ruanda, RD del Congo, Uganda y Mali, en África), el alcance de las intervenciones en terreno ha quedado muy mermado.
acciones abandonadas En Latinoamérica se han tenido que abandonar acciones de cooperación con una larga trayectoria en las zonas andinas de Perú y en otras zonas rurales de Nicaragua mientras que la iniciativa más importante, el proyecto multipaís (Guatemala, Perú y Bolivia) de salud integral incluyente se ha quedado seriamente tocado, según indicó la ONGD. Este proyecto busca diseñar un nuevo sistema de salud intercultural para gran parte del continente. En África, Medicus Mundi vuelve a una situación equiparable a la de los años 80 ya que se ha tenido que salir prácticamente de Mali, por los recortes y por el conflicto bélico, se han dejado las zonas urbanas de la RD del Congo y otras rurales de Uganda mientras que en Ruanda se mantendrá con fondos propios el histórico Hospital de Nemba, pero se ha paralizado cautelarmente el proyecto que buscaba fortalecer el distrito de salud del que es cabecera este centro sanitario.
Por otra parte, el efecto sobre los socios locales de estos países con los que se colabora, cerca de una veintena de entidades, también será muy importante mientras que en las plantillas de la sede central de Navarra y de las delegaciones de la organización en el Sur también se ha procedido a un ajuste notable. En concreto, los costes de estructura se reducirán un 36% mediante salidas de profesionales contratados así como reducciones salariales y de jornada entre los que continuarán.