Navarra carga contra la reválida de 6º de primaria

pamplona - ¿Cuáles son las razones del Gobierno foral para oponerse a la reválida que la ley educativa LOMCE plantea en este curso para 6º de Primaria? Primero, que no es una evaluación al uso, sino una prueba que se realiza “en un momento puntual” y descontextualizado del progreso de los y las estudiantes; segundo, que solo mide parte de las siete competencias de esta etapa educativa; y tercero, que es diferente de los informes que pueden haber realizado antes los maestros y maestras. El hecho de que sea una prueba externa, y las dudas sobre en quién recaerá diseñarla son varios de los argumentos clave para quienes critican esta norma.

El Ejecutivo navarro es uno de ellos, y por eso ha decidido sumarse al recurso anunciado por las comunidades autónomas contrarias a la conocida como ley Wert, que son las no gobernadas por el Partido Popular. Ayer, tanto Navarra como Aragón escenificaron en un acto conjunto su oposición a esta reválida obligatoria, que sería la primera en realizarse como tal desde la aplicación de la LOMCE y que, en el futuro, podría ser clave en el expediente del alumnado para decidir si supera Primaria o no. Fuentes sindicales con representación en Educación recuerdan, no obstante, que en el calendario previsto para implantar la LOMCE (su extensión total sería a partir del curso 2016-2017) esta prueba, aunque se hiciera este curso, no afectaría al expediente.

Sea como fuere, las comunidades contrarias a la ley han retomado ahora las medidas de presión contra la norma. Por ejemplo, esta firma, que tuvo lugar en Zaragoza, es el adelanto de un recurso que, en principio, se apoyará desde “al menos” diez comunidades autónomas, según precisó el Gobierno foral a través de un comunicado. Son las que componen el a veces llamado frente antiLOMCE, como Andalucía, Baleares, Canarias, Cantabria, Castilla La Mancha, Cataluña, Euskadi y Extremadura, a las que también pueden sumarse Asturias y la Comunidad Valenciana.

Prácticamente son las mismas que ya en agosto, cuando el Ministerio de Educación y las comunidades autónomas se reunieron en la Conferencia Sectorial de Educación para estudiar posibles cambios en la LOMCE, criticaron que la actitud popular había sido la de plantear una negociación “inviable”. Entonces, una de las concesiones del nuevo ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo, fue la posibilidad de aplazar las reválidas de Secundaria. Las comunidades antiLOMCE anunciaron entonces medidas para frenar la LOMCE (como paralizar el calendario para su implantación), y así surge ahora, según apuntaron fuentes del Departamento foral de Educación, la posibilidad de presentar este recurso.

En concreto, se plantea un recurso contra el Real Decreto que establece que este examen sea obligatorio para el alumnado de 6º de Primaria. Tanto el consejero navarro de Educación, José Luis Mendoza, como la titular del ramo en Aragón, Mayte Pérez Esteban (PSOE), coincidieron al criticar que esta reválida no cuenta con consenso, no supone una evaluación habitual del sistema educativo que se haga con carácter continuo, global, formativo y orientador; y supone “un cuestionamiento de la profesionalidad y objetividad evaluadora del profesorado e, incluso, de los equipos directivos de los centros o de la inspección”, al recurrir a profesionales externos para validar estas pruebas.

Este anuncio es un paso más en las medidas de presión de estas comunidades, la mayoría gobernadas por el PSOE o fuerzas nacionalistas, contra la ley que impulsó el ahora exministro José Ignacio Wert, y a la que se auguraba una fecha de caducidad cercana ante el resultado de las elecciones generales. Ahora, con el PP gobernando en funciones y un panorama estatal convulso, desde Navarra y Aragón han vuelto a criticar la ley.

en este curso Cabe recordar que, con la LOMCE sobre la mesa, en este curso educativo toca realizar esta prueba en 6º de Primaria. Está considerada una reválida porque sería vital para decidir si el alumnado pasa de etapa educativa, como pasaría por ejemplo en la prueba de 4º de la ESO (prevista por primera vez para el curso 2016-2017 pero sin efectos académicos, aunque sí los tendría, en principio, en el curso 2017-2018). Otras pruebas externas son más bien orientativas, porque no dejan rastro en el expediente, pero su realización también ha generado polémica: por ejemplo, el curso pasado, con José Iribas (UPN) al frente de Educación, al final en Navarra se realizaron las pruebas diagnóstico de 3º de Primaria a pesar de que hubo padres y madres del alumnado que se negaron a ello.

Sindicatos como LAB, ELA o Steilas ya plantearon medidas para frenar la implantación de la LOMCE e, incluso, fuentes de las centrales exigen al Gobierno de Navarra que retire los currículos que ya dejó aprobados el anterior Gobierno foral. Por el momento, falta por concretar cuándo se plantea finalmente ese recurso conjunto entre diversas comunidades y si llega a tiempo para frenar las pruebas de este curso académico.

hoy, reunión sobre el pai y la ope

Nueva presentación. Cómo es el Programa de Aprendizaje en Inglés (PAI) en Navarra y el British en Aragón fue uno de los temas que también se abordó en la reunión entre los responsables de Educación de Navarra y Aragón. El Gobierno de Navarra, por cierto, volverá a presentar hoy el informe realizado con la primera evaluación del PAI, esta vez a los sindicatos con representación en la Mesa Sectorial de Educación. Otros de los asuntos que se prevé abordar en esa reunión, según apuntan fuentes sindicales, es qué margen de negociación hay en la propuesta de plazas realizada por el Gobierno foral en la Oferta Pública de Empleo.

‘Insumisión’ a la LOMCE. Padres y madres del alumnado se movilizaron durante el pasado curso para que sus hijos e hijas no realizaran la prueba diagnóstica para 3º de Primaria. Por ejemplo, enviaron cartas y recogieron firmas para exigir que se obviara esa prueba externa contemplada en la LOMCE. Estaba previsto realizarlas a 6.724 estudiantes a comienzos de mayo y hubo unas 300 familias que decidieron no realizar el test, pero finalmente el Departamento (entonces encabezado por Iribas) pidió que realizaran la prueba fuera de plazo.

Una negociación frustrada. El Ministerio de Educación, con Íñigo Méndez de Vigo al frente, se reunió con representantes de las comunidades autónomas el pasado mes de agosto para negociar posibles cambios en la LOMCE. No hubo acuerdo, y las comunidades contrarias a la ley (muchas de ellas gobernadas por el PSOE) anunciaron que estudiaban medidas para frenar su expansión.

Las generales, ¿claves? El consejero navarro de Educación afirmó nada más llegar al cargo que la LOMCE debería tirarse a la basura y confió en que fuera una ley con fecha de caducidad por un posible vuelco en el Gobierno central tras las elecciones generales. Ahora, el futuro de la norma sigue sin aclararse.