PAMPLONA - La Policía Foral y la Policía Nacional han detenido a catorce personas de nacionalidad rumana, integrantes de un clan familiar, a los que se les imputan una treintena de robos en empresas de toda Navarra. Los cinco cabecillas de la organización han ingresado en prisión por orden del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Aoiz.

La operación Odesa/Makila, en la que también se ha imputado a otras doce personas, algunas de las cuales ya están en prisión por otros robos fuera de España, se inició a principios de 2016 con la recepción de varias denuncias por robos con fuerza en empresas de polígonos en las que había circunstancias coincidentes. Por un lado, era similar el modus operandi -butrones y apalancamientos-, y por otro, los objetos robados, ya que además de dinero y joyas, se sustraían herramientas y material susceptible de venderse como chatarra (perfiles galvanizados, piezas de acero, motores, bobinas de cobre, máquinas, material eléctrico, calderas, etc).

Las denuncias se interpusieron por robos en polígonos de Mutilva, Agustinos/Berriozar, Sakana, Tudela y Aoiz. La Policía Foral introdujo datos de interés en el Citco (Centro Inteligencia contra el Terrorismo y Crimen Organizado), que resultaron coincidentes con pesquisas de Policía Nacional, momento en el que las actuaciones fueron coordinadas y conjuntas.

Para perpetrar los robos la banda utilizaba vehículos lanzadera para informar de posible presencia policial o circunstancias que podían dificultar los butrones y apalancamientos de puertas en las empresas. Como muestra del perjuicio económico causado en sus casi dos años de actividad, una empresa de Mutilva asaltada en dos ocasiones sufrió robos por valor de 600.000 euros, incluido un vehículo que los detenidos utilizaron para el transporte del material robado y que fue recuperado días más tarde.

Los investigadores han constatado que el dinero obtenido en los robos y posteriores ventas era remitido a Rumanía vía aérea desde Zaragoza, en cantidades máximas de 10.000 euros que permite la legislación. Uno de los integrantes del grupo había obtenido de una chatarrería 46.000 euros durante un año, lo que indica la cantidad de hierro y cobre que manejaba.

Las detenciones de la Policía Nacional se realizaron el lunes y martes en Villava y La Rotxapea en Pamplona, mientras que la Policía Foral actuó en La Milagrosa, Etxabakoitz y Casco Viejo. Entre los catorce detenidos, todos ellos sin trabajo conocido, hay cuatro mujeres. Han ingresado en prisión V.I., de 31 años; F.P., de 23; I.T., de 33; F.M., de 35; y L.E., de 36.

En las viviendas del barrio de La Milagrosa, los agentes intervinieron multitud de herramientas, como taladros industriales para butrones, martillos mecánicos para perforar piedra, generadores de electricidad de gran capacidad, soldadoras, ingletadoras para cortar madera y sierras radiales. También se decomisaron varios vehículos, entre ellos dos furgonetas con material para perpetrar los robos.