- El FBI detuvo ayer por la mañana en New Hampshire (EEUU) a Ghislaine Maxwell, la amiga y socia del financiero Jeffrey Epstein, acusado de explotación sexual de menores y que se suicidó en prisión hace casi un año. Maxwell, de 58 años, está acusada de colaborar en la trama de abusos y tráfico sexual con jóvenes y niñas atribuida a Epstein, un millonario neoyorquino bien conectado, que contó entre sus conocidos con Donald Trump, el príncipe Andrés o Bill Clinton.

Maxwell, que tiene 58 años y se encontraba prófuga de la Justicia desde hacía ya casi un año cuando Epstein fue arrestado, ha sido acusada de ser cómplice de los delitos cometidos por Epstein, así como de conspirar para traficar con menores a las que pedía que llevaran a cabo actividades sexuales de forma ilegal. También ha sido acusada de traficar con menores para su explotación y de perjurio.

La hija del magnate de la edición británico Robert Maxwell ya había sido señalada cuando estalló el caso por varias denunciantes de Epstein como una suerte de madame del millonario y sus amigos, la persona que se encargaba de reclutar, arreglar y explotar a las chicas en las mansiones de Florida y Nueva York, entre otras. Según algunas denuncias, la amiga de Epstein buscaba a muchachas en dificultades financieras y les prometía ayuda para su educación y sus carreras profesionales. Sin embargo, no habían derivado en cargos formales hasta ahora.

"Al menos desde 1994 y hasta 1997, Maxwell asistió, contribuyó y facilitó los abusos a menores de 18 años cometidos por Epstein, básicamente reclutando a estas jóvenes y contribuyendo a que Epstein abusara de ellas", señalan documentos judiciales a los que tuvo acceso la cadena CNN. Entre las víctimas de Epstein se encontrarían incluso niñas de catorce años.

Epstein llevaba apenas un mes en una cárcel tras ser detenido cuando se ahorcó en su celda en agosto de 2019, lo que llevó a cerrar el caso en su contra. El acusado, de 66 años, fue hallado "inconsciente" en su celda de la Unidad de Alojamiento Especial del Centro Correccional Metropolitano de Manhattan y, según The Washington Post, las fracturas presentes en su cuello también podrían ser producto de un estrangulamiento.

El caso de Epstein ha adquirido especial notoriedad por su relación con la élite política de Estados Unidos, desde el matrimonio Clinton al actual inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump. El presidente de Estados Unidos reconoció que sabía quién era Epstein, residente de Palm Beach, donde Trump tiene un campo de golf. Desde su fallecimiento, la presión de la opinión pública ha ido aumentando para que se lleve ante la Justicia a todos aquellos cómplices que facilitaron la incursión de estos delitos por parte de Epstein.