Los indicadores de la situación epidemiológica relacionada con el COVID-19 en Navarra encadenan su quinta semana consecutiva de descenso, según se desprende de los datos publicados en el último informe del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (ISPLN/NOPLOI). Así, entre el 15 y el 21 de agosto se confirmaron por PCR o antígeno un total de 298 casos, lo que supone un descenso del 26,4% frente a la semana precedente. La incidencia también bajó en mayores de 60 años, entre quienes se contabilizaron 179 casos, un 23,8% menos que en el período anterior. Además, los ingresos hospitalarios descendieron un 31,8%, pasando de 22 a 15 la pasada semana, y las defunciones un 50%, de 8 a 4.

El descenso en las cifras de incidencia se produjo en todos los grupos de edad, si bien la tasa más alta se sigue observando entre mayores de 75 años (0,2% semanal). Dado que la incidencia sigue siendo todavía alta en mayores, desde Salud Pública se insiste en que mientras haya circulación del SARS-CoV-2, conviene que las personas mayores o con enfermedades crónicas, así como las personas de su entorno, mantengan las medidas preventivas, aunque estén vacunadas. En este sentido, el informe de Salud Pública recuerda que, desde el mes de mayo, más del 13% de la población mayor de 65 años ha contraído la infección por primera vez.

Asimismo, al igual que en semanas anteriores, predomina la circulación de las subvariantes Ómicron BA.4 y BA.5 (97%), frente a las cuales las infecciones previas no protegen totalmente.

Según información de SNS-O, la ocupación hospitalaria también refleja un notable descenso. El total de pacientes en las diferentes modalidades de hospitalización pasó de 68 el 14 de agosto, a los 55 con los que se cerró la semana pasada. Por su parte, el número de pacientes hospitalizados en la UCI en esas mismas fechas bajó de cinco a dos.

Asimismo, en la última semana ha seguido descendiendo la presencia de material genético del SARS-CoV-2 en las aguas residuales de la Comarca de Pamplona / Iruña y de Tudela.