A finales de 2022 la Comunidad Foral tenía 36.167 personas con una discapacidad igual o superior al 33% –el 5,4% de la población–, de manera que el colectivo experimentó “un suave crecimiento” del 0,7% respecto al año anterior. Así lo recoge el III Informe sobre la Discapacidad de Navarra, realizado por la recién creada Oficina de Análisis y Prospección, y que el Gobierno publicó este sábado con motivo del Día de la Discapacidad, que se celebra este domingo. 

Este trabajo, además, constata que este es un colectivo “masculinizado” –el 53,3% son hombres, aunque cada año la proporción de mujeres crece–, “una población madura” –el 85% tienen más de 40 años, siendo el grupo más frecuente el de 60 a 79 años, con un 36,6%– y con mayoría de personas con un grado de discapacidad entre el 33% y el 44%

Asimismo, el informe destaca que los servicios y prestaciones que reciben las personas con discapacidad volvieron a aumentar un 4,8% en 2022 –motivado principalmente por la subida del 5,2% en los servicios–, por encima del incremento registrado en 2021 (que fue del 4,2%). Sin embargo, señala que ostentan unas tasas de pobreza menores que las registradas por el resto de población sin discapacidad, situándose en el 18,8% el riesgo de pobreza y en un 7,5%, el de pobreza severa.

En términos absolutos, como recoge el informe, el año pasado se concedieron 21.209 ayudas a 36.167 personas con discapacidad, si bien considera que “no refleja la asistencia real que recibe el colectivo”, porque tanto desde Derechos Sociales como desde otros entes, públicos o privados, se proporcionan servicios, ayudas o desgravaciones fiscales.

El estudio concluye también que “existe una clara relación entre dependencia y discapacidad”. De hecho, apunta que el 55,9% de las personas dependientes tiene a su vez reconocida la condición de discapacidad y, a la inversa, el 26,8% de personas con discapacidad tienen reconocida la dependencia. De ellos, el 56,7% ostenta un alto grado de discapacidad (igual o superior al 75%).

Pobreza y situación laboral

Por otro lado, este trabajo constata que en 2021 la evolución de las tasas de pobreza para las personas con discapacidad fue positiva, pero no lo suficiente para recuperar las tasas de 2019, previas a la pandemia, ya que fueron 5 y 6 décimas superiores. En relación al empleo, se confirma que este colectivo “sigue estando en gran medida aislado de los procesos de inserción en el mercado laboral”. Al respecto, el informe señala que el porcentaje que suponen tanto en la afiliación (1,36%) como en la contratación (1,19%) está “muy por debajo del porcentaje que suponen respecto a la población en edad de trabajar”.

En cuanto al perfil, 7 de cada 10 personas (el 69,3%) presentan una discapacidad de tipo física, el 41,1% tiene un grado entre el 33% y el 44% y la mayor parte se concentran en el área de Pamplona y Comarca, con un 59,6%. De hecho, los servicios sociales de base de Pamplona y Burlada ostentan las tasas de discapacidad más altas (6,5% y 6,3%, respectivamente), mientras que Ayegui e Isaba las menores (2,3% y 2,9%).

PERSONAS CON DISCAPACIDAD EN NAVARRA

Por sexo

  • Hombre 19.275/53,3%
  • Mujer 16.892/46,7%

Por tipo de discapacidad

  • Discapacidad intelectual 4.396/12,2%
  • Enfermedad mental 6.670/18,4%
  • Físicas 25.059/69,3%
  • Mixtas 42/0,1%

Por grados de discapacidad

  • 33 al 44% 14.864/41,1%
  • 45 a 64% 6.335/17,5%
  • 65 a 74% 8.288/22,9%
  • Igual o superior al 75% 6.680/18,5%

Por edad

  • 0-19 años 2.133/5,9%
  • 20-39 años 3.315/9,2%
  • 40-59 años 9.694/26,8%
  • 60-79 años 13.234/36,6%
  • 80 y más años 7.791/21,5%