El informe elaborado por el despacho de abogados Cremades & Calvo-Sotelo, que recoge números de varias fuentes, entre ellas el informe de la Universidad Pública de Navarra, eleva a un total de 87 casos las denuncias vinculadas en la Comunidad Foral con posibles abusos sexuales cometidos en el seno de la Iglesia católica y de sus entornos escolares. De esta forma, Navarra es la segunda provincia con más casos, por debajo de Madrid, gracias en gran medida a que las denuncias que se han recogido aquí han tenido suficientes puntos de interés para que fueran depositadas, aunque todas ellas se archivaran o quedaran prescritas porque el autor o autores hubiera fallecido o por el tiempo pasado.

La colaboración del Gobierno foral para impulsar iniciativas con el fin de que sean reconocidas las víctimas de abusos es sin duda una enorme catapulta de esperanza para estas personas, que han sufrido durante décadas en silencio y que a día de hoy todavía el dolor sigue acompañanado a estas personas. La Conferencia Episcopal ha querido sin embargo hacer su informe propio, titulado con el nombre ilustrativo y paradójico Para Dar Luz, desdeñando ciertas conclusiones del elaborado por el despacho de abogados.

En este sentido, en los números que recoge la propia Iglesia a través, por ejemplo, de la propia oficina que el Arzobispado de Pamplona y Tudela ha habilitado para tal efecto, se han recibido desde 2007 un total de una decena de denuncias, seis que se consideran probadas, otras dos no probadas y dos más que están en investigación. Estas cifras ya habían sido reconocidas por los responsables de la Diócesis en una tensa rueda de prensa hace dos meses en la que sacaron a la luz dichos números que no habían trascendido hasta ahora. Lo que se comprobó entonces, y queda constatado ahora, es que de los archivos de la diócesis no aparece ningún caso que fuera denunciado años atrás al 2007. Igualmente, entonces se especificó que algunas de esas denuncias no habían llegado a los tribunales y posteriormente, otro portavoz del Arzobispado de Pamplona llegó a admitir que si no habían seguido su curso dichas denuncias era porque se había indemnizado a las víctimas.

El secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Francisco César García Magán, calificó de “lamentable, execrable y condenable” la cifra de en torno a mil casos de abusos sexuales a menores en la Iglesia que los obispos calculan tras analizar los informes del Defensor del Pueblo, del despacho Cremades & Calvo-Sotelo y de la propia Iglesia, y reconoció que este problema es “de la sociedad” pero tiene “un plus de gravedad” en el ámbito religioso de la Iglesia y otras confesiones. “Es muy lamentable, es execrable, es condenable”, manifestó García Magán, tras recibir el Informe del despacho Cremades & Calvo-Sotelo, del cual, los obispos han publicado algunos de sus datos. El informe Cremades recoge un total de 1.383 denuncias de abusos sexuales a menores en la Iglesia desde principios del siglo XX y “un mínimo de 2.056 víctimas”. Si bien, los obispos calculan, en base a todas las investigaciones realizadas, que los casos no superan los 1.000.

Frente a estos datos, el secretario general de los obispos advirtió de que los abusos sexuales a menores son un problema “de la sociedad” aunque ha reconocido que en la Iglesia tienen “un plus de gravedad”. “Ante este problema social, porque es un problema de la sociedad, de otros ámbitos, tiene un plus de gravedad en el ámbito religioso, de la Iglesia Católica y de otras confesiones, porque se exige un plus de coherencia de vida, un plus de ejemplaridad”, explicó. También puntualizó que los abusos sexuales tienen igualmente “un plus de gravedad en el ámbito familiar” que es el “primer círculo de pertenencia como seres humanos”.

Discrepancias

El despacho de abogados Cremades & Calvo Sotelo propone indemnizaciones de entre 6.000 y 100.000 euros para las víctimas de abusos en la Iglesia y la creación de un fondo inicial de 50 millones de euros, por parte de la Conferencia Episcopal y la Conferencia de Religiosos, para cubrir estos gastos. Es una de las recomendaciones que el despacho hace en su informe sobre abusos a menores en la Iglesia. La auditoría de Cremades recoge en principio un total de 1.383 denuncias, “siendo indeterminado el número de personas victimarias”.

Algunas claves

Fechas y cifras. Las fechas de comisión de los abusos en el Informe Cremades abarcan desde el año 1905 a la actualidad, siendo las décadas donde registran un mayor número de abusos la década de 1960 a 1970 y de 2010 a 2019. Mientras, la Conferencia Episcopal indica que los casos se registran, por una cuestión de “biología”, desde la década de los 40 hasta la actualidad, con una mayor parte de abusos denunciados entre la mitad de la década de los 60 hasta mitad de la década de los 80, cuando empiezan a declinar. En cuanto al número de víctimas, Cremades apunta un total de 1.599 y añade que en 277 denuncias recibidas el número es “indeterminado” y en otras 180 no consta, por lo que deduce 2.056 víctimas.