El euskera está renaciendo con fuerza en la zona media de Navarra gracias al esfuerzo de familias, instituciones y municipios, en definitiva, del conjunto de la sociedad. Precisamente las familias de Valdemañeru (Mañeru, Zirauki, Artazu y Guirgillano-Girgillao) han recibido hoy un reconocimiento especial por parte de la Fundación Iruñeko Komunikabideak Fundazioa (IKF) de Pamplona y Euskaltzaindia/Real Academia de la Lengua Vasca, por su esfuerzo en dar a sus hijos e hijas la oportunidad de aprender euskera. Un esfuerzo en comunidad ya que son 45 niños y niñas (prácticamente todos los de esa edad) de entre 8 y 12 años los que están estudiando en la lingua navarrorum que se perdió a lo largo del siglo XIX (antes en Mañeru y Zirauki que en otras localidades) si bien a principios del siglo XX todavía quedaban euskaldunzaharras en Artazu y Guirguillano. Hoy, en pleno siglo XXI el euskera emerge con fuerza. Así, se ha distinguido a las familias de las citadas localidades limítrofes entre Zona Media y Tierra Estella en las que se había perdido el euskera, familias que han demostrado su compromiso diario con la recuperación y fortalecimiento de la lengua vasca. La celebración se enmarca dentro de los acuerdos de colaboración que mantienen Iruñeko Komunikabideak Fundazioa y Euskaltzaindia. En el acto han estado presentes las alcaldesas de Mañeru (Itziar Martínez) y Artazu (María Rosario Echechipía) y el alcalde de Cirauki (Pedro María Apesteguía).

El acto de hoy se ha llevado a cabo en un ambiente festivo y familiar. Además, antes de la entrega de los premios, se ha proyectado en el Ayuntamiento de Mañeru un emotivo vídeo creado expresamente para la ocasión por el cineasta Oskar Alegría, titulado Gu berde iluna gara! (¡Nosotros somos verde oscuro!). El cineasta está muy ligado a esta comarca y ha elaborado un entrañable trabajo protagonizado por niños y niñas de la zona. En él, los y las menores de Valdemañeru hablan entre otras cosas de la presencia y de la influencia que ha tenido el euskera en este valle: desde la pérdida de nuestra lengua hasta el proceso de revitalización actual.    

La delegada de Euskaltzaindia en Navarra, Sagrario Aleman, ha mostrado su alegría durante el acto y ha querido destacar que se ha querido premiar “el esfuerzo que los vecinos de Valdemañeru y de los ayuntamientos, que están trabajando con ahínco en la recuperación de la lengua de sus antepasados”. “Hemos querido mostrar nuestro reconocimiento a esa labor y así animamos a estas familias a que sigan por la misma senda -ha añadido la académica de Euskaltzaindia-. Esperemos que cunda el ejemplo y que otros pueblos navarros trabajen también en la misma línea”, remarcó.

El euskera está regresando a uno de sus territorios tradicionales con la mirada puesta en los niños y en las niñas, con un guiño a las iniciativas que se llevaron a cabo antes y después de la guerra para premiar a los niños y niñas euskaldunes de Navarra

Enrike Diez de Ultzurrun - Fundación Irureño Komunikabideak Fundazioa

Por su parte, el presidente de IKF, Enrike Diez de Ultzurrun, ha señalado que “el euskera retrocedió en el siglo XIX por diversos factores, entre otros, como consecuencia de las amonestaciones sufridas por los niños y niñas euskaldunes en la escuela. Ahora, especialmente gracias a la ciudadanía, gracias a las familias, el euskera renace y vuelve a estar presente en Valdemañeru, y hoy hemos querido agradecerlo". En palabras del presidente de Iruñeko Komunikabideak Fundazioa, “este tipo de iniciativas han estado muy arraigadas en Navarra, ya que se empezaron a realizar antes de la guerra a través de la asociación Euskeraren Adiskideak de Pamplona. Hay que recordar, además, que después de la guerra, a partir de 1957, la propia Diputación de Navarra premió a 7.000 niños y niñas vascoparlantes, para motivarlos e incentivar el uso del euskera entre los más jóvenes. Pues bien, hoy también hemos querido recordar aquella iniciativa”.

Con este premio se pretende destacar el esfuerzo que la ciudadanía y los ayuntamientos de Mañeruibar han realizado y están realizando para recuperar la lengua de sus antepasados

Sagrario Aleman - Euskaltzaindia

Alegría, entre viaje y viaje por el mundo para dar a conocer su última película, tuvo tiempo para realizar este trabajo que habla del pasado y el futuro de una lengua viva. Lo ha hecho con todo el cariño del mundo puesto que sus padres son de Artazu y habla muy bien el euskera. El último trabajo de Alegria lleva por título Zinzindurrunkarratz, filmado en 2023 y ha sido premiada en diversos certámenes como el Festival du Cinéma Espagnol de Nantes, el Festival dei Popoli de Florencia, el DOC Nueva York y la Seminci de Valladolid. En este último trabajo, Alegria transita el camino que su abuelo pastor recorría desde Artazu hasta la sierra de Andia, recuperando del olvido el trayecto en sí y las vivencias y sonidos que este alberga.