El nuevo curso escolar arranca con la primera polémica. Familias de alumnado transportado de los colegios públicos de Orkoien (San Miguel y Auzalar) y Remontival de Estella-Lizarra están en pie de guerra después de conocer los cambios realizados por el Departamento de Educación en los horarios de regreso de los autobuses escolares. Una modificación, denuncian, que han conocido la misma semana en el que se iniciaban de las clases y que, dicen, les genera problemas de organización familiar.

En el caso del colegio Remontival, con jornada partida, Educación ha retrasado el horario de regreso hasta las 15.45 horas durante los meses de septiembre y junio, y todos los miércoles del curso, que tienen clases solo por la mañana. “Este cambio supone que o venimos a recoger a nuestros hijos cuando terminan las clases a las 13 horas o nuestros pequeños tendrán que esperar hasta las 15.45 horas”, explicó Patxi Martínez, uno de los padres afectados. Este retraso se debe a que, el pasado año, el comedor no estaba subvencionado los meses de septiembre y junio por lo que las familias de alumnado transportado que dejaban a sus hijos a comer (el comedor lo gestionaban las apymas), tenían que recoger a sus hijos por su cuenta. El autobús salía a las 13 horas con el alumnado que no iba al comedor.

Este curso, al estar subvencionado, el transporte se vincula al comedor y la previsión era que saliera después de comer. Sin embargo, la extensión del comedor “ha provocado problemas de logística de autocares y las empresas no tienen suficientes coches en esos periodos concretos”. De ahí que, en el caso de Estella, los autobuses van primero a recoger al alumnado del instituto, que sale a las 14.30 horas, y después vuelven al colegio a por los txikis. De esta forma, estos niños y niñas se quedan desde las 14 horas que terminan de comer hasta las 15.45 horas “sin nada que hacer”. Eso sí, Educación garantiza que las cuidadoras del comedor estarán con el alumnado e insiste en que las familias “podrán ir a recoger a sus hijos antes o después de comer sin perder un solo derecho y pudiendo optar a las ayudas individualizadas de transporte por la vuelta a sus domicilios realizados por sus propios medios”.

La decisión de Educación, reconoció otra madre de Abaigar, “nos ha pillado de sorpresa y ahora cada familia tendrá que volver a decidir si deja que sus hijos estén hasta esa hora o vamos al centro a por ellos". Otro padre reconoció que "aún no hemos decidido que que los peques se queden en el comedor hasta que no nos aclaren las cosas que nos aclaren quién paga el comedor y no expliquen quien se va a hacer cargo de ellos ya que los docentes acaban su horario a las 13 horas”.

En Orkoien se adelanta una hora la salida

En los colegios públicos de Orkoien, donde también hay jornada escolar partida, a las familias de alumnado transportado que viven en Echarri, Etxauri, Vidaurreta e Ibero (unos 80) también les han modificado el horario de vuelta. En su caso, el autobús de regreso de septiembre, junio y todos los viernes del año (en los que tienen horario de mañana) ha adelantado su salida de las 14.45 a las 13.45 horas. “Mis hijos llegan a casa a las 14.05 en vez de a las 15.05 horas como estaba previsto. ¿Cómo nos organizamos en los trabajos para estar una hora antes?”, se pregunta un padre afectado, que denuncia que “Educación incumple lo pactado y además nos avisan la víspera, sin margen para poder organizarnos”. 

En el colegio, afirmó, “nos dicen que pueden estar hasta las 14.45 horas e ir a recogerlos nosotros. Educación dice que no perdemos derechos, pero sí perdemos ya que tenemos que ir a por ellos”.