La Audiencia de Navarra ha archivado el procedimiento judicial que se seguía contra nueve de miembros del grupo ultra Casuals, una facción de los Boixos Nois e hinchas del F.C. Barcelona, por el asalto que protagonizaron hace dos años en el bar Ezpala, situado en el barrio de Iturrama de Pamplona.
En un auto conocido ahora, al que ha tenido acceso DIARIO DE NOTICIAS, la Audiencia atiende la petición de varios de los encausados y entiende que no existen pruebas contra ellos que puedan llevarles a juicio. Así, el caso solo continuará con la acusación contra un procesado, del que se han encontrado restos de ADN en uno de los palos utilizados en el asalto a la taberna. El archivo es definitivo contra el resto de encausados debido a la imposibilidad de que sean identificados. Y ello pese a que en la investigación policial se ha situado a la mayoría de investigados en Pamplona durante el día de los hechos, el 8 de noviembre de 2022, coincidiendo con el partido en El Sadar que disputaban entre semana Osasuna y Barcelona.

Los hechos tuvieron lugar en la taberna Ezpala, situada en la calle San Juan Bosco del barrio de Iturrama, punto de reunión de miembros de Indar Gorri, adonde llegaron en varios vehículos un grupo de varones armados con palos.
A continuación, se introdujeron en el local y comenzaron a causar daños en el interior. En el curso de los violentos incidentes se produjo el lanzamiento de bengalas, como puede verse en los vídeos, y también resultaron lesionados tres aficionados rojillos, ninguno de ellos de gravedad. En el lugar se personaron agentes de la Policía Municipal de Pamplona, que acordonaron el local.

"Fue entrar, destrozar el bar y salir, porque no nos dio tiempo ni a verlo", declaraba una testigo. "Para cuando nos dimos cuenta llegó la Policía con las sirenas y ya se habían ido", añade.
El objetivo de los atacantes, según testigos, no era encontrarse con estos aficionados de Osasuna, sino destrozar el bar donde quedan "porque tendrían que haber ido más tarde".
El Club Atlético Osasuna y el FC Barcelona condenaron esa misma tarde los incidentes en un comunicado. El presidente culé Joan Laporta se puso en contacto con el presidente del Club Atlético Osasuna, Luis Sabalza, para compartir el rechazo del equipo navarro ante lo sucedido.