La asociación Aralar advirtió este miércoles de que los menores de edad se inician en el juego a “edades cada vez más tempranas”, a una media de 15 años, y destacó que uno de cada cinco jóvenes de entre 14 y 18 años ha jugado en el último año y el 6% “han desarrollado ya adicción al juego”, cuando la prevalencia general es del 1%. Así lo indicaron representantes de la asociación, en una comparecencia parlamentaria, donde destacaron que “parte de la atención” a personas con ludopatía “la están prestando las entidades sociales” y las subvenciones no cubren el 100% del tratamiento.
Criticaron, además, el “retraso” en el desarrollo de la ley del Juego en cuestiones como el control de accesos a menores o personas autoprohíbidas. Medidas que, “con suerte”, entrarán en vigor a finales de 2025. Esto hace que la Comunidad foral sea un “reclamo” para personas de comunidades limítrofes con “regulaciones más restrictivas”. La presidenta de Aralar, Raquel Pardo, incidió en la necesidad de una “mejor recogida de datos para conocer la dimensión real de este problema y las medidas y recursos necesarios”. Así, señaló que en 2023 fueron 111 los pacientes atendidos por ludopatía en la red pública y, ese mismo año, Aralar atendió 200 consultas de información relacionadas con problemas del juego. Datos que son “la punta del iceberg” teniendo en cuanta que “725 personas se han inscrito en el registro de autoprohíbidas”.
Según indicó, la prevalencia de la ludopatía podría suponer el 4% o 5% de la población; lo que significa que unas 6.800 personas en Navarra tendrían “problemas de juego patológico”. Así las cosas, alertó de que en la Comunidad foral “sólo un 3,2% de las personas con adicción al juego están diagnosticadas y en tratamiento” debido al “estigma”. A este respecto, apuntó que “el miedo al señalamiento es un obstáculo a la hora de pedir ayuda” y que la ludopatía “es una adicción silenciosa, sin signos externos y pasa desapercibida a su entorno hasta que un día se empiezan a atar cabos”. A esto se une el “doble estigma” en el caso de las mujeres y son “pocas las que piden ayuda, lo hacen tarde y en una situación más deteriorada”. Según detalló, 1 de cada 3 personas con ludopatía es mujer pero sólo 1 de cada 10 piden ayuda. De hecho, de los 77 casos activos que atiene Aralar sólo uno es mujer.
Por otro lado, las representantes de la asociación advirtieron de la “absoluta y peligrosa normalización del juego en nuestra cultura” de manera que el 84% de la población española admite haber jugado a un juego de azar y “lo ven como una actividad normal de entretenimiento”. A ello sumaron que la posibilidad de jugar on line es “cada día más accesible” y para “muchos jóvenes se ha convertido en parte de su ocio”.
“Cada vez se juega más y Navarra no se queda al margen”, resaltaron, para indicar que el año se gastaron casi 300 millones en el juego, cinco millones más que el anterior. Además, destacaron que Navarra está “en el ranking de comunidades autónomas con más gasto en apuesta deportivas”.
