La Real Federación Española de Caza (RFEC), formada por las federaciones autonómicas de caza, y Mutuasport, la mutua de los cazadores españoles, donaron recientemente un total de 24.000 euros a los afectados por la DANA ocurrida en la Comunidad Valenciana y en Castilla-La Mancha.
De esta forma, 20.000 euros se destinaron a la Comunidad Valenciana y los 4.000 restantes, a Castilla-La Mancha. Ambas cantidades están fueron canalizadas a través de las federaciones de caza de las regiones afectadas, para poder comprar los materiales básicos y alimentos que más se necesitaban en los municipios afectados por esta tragedia: botas de agua, guantes, palas, escobas, cubos, fregonas, carreterillas, productos de limpieza y alimentos no perecederos.
Desde la RFEC y Mutuasport se realizó un llamamiento a todo el sector para que hicieran sus donaciones siguiendo la senda iniciada por estas entidades y otras empresas que ya estaban haciendo sus aportaciones para ayudar a los miles de personas afectadas por la situación. “Los cazadores demostramos una vez más que estamos y estaremos siempre dispuestos a ayudar a los que más lo necesitan”, destacó en el momento de realizar la donación el entonces presidente de la RFEC, Manuel Gallardo.
La Federación de Caza de la Comunidad Valenciana (FCCV) habilitó una cuenta bancaria propia de la delegación de Castellón (ES62-0081-0165-5300-0224-9635) para que los cazadores pudieran realizar sus aportaciones a los damnificados por el episodio de DANA. La intención era agrupar todas las donaciones de la forma más directa posible y realizar una entrega conjunta en beneficio de los afectados.
La FCCV ya realizó la primera entrega de suministros en la localidad de Torrent, gracias al apoyo de cazadores, la empresa Sapesa PSG y el Ayuntamiento de Monforte del Cid, que unieron fuerzas en una acción solidaria sin precedentes. Esta fue, no obstante, la primera de varias entregas previstas dentro de una iniciativa que se marcó como objetivo llevar suministros esenciales a las comunidades afectadas por el temporal.
Con una actuación que incluyó la coordinación de voluntarios, la aportación de vehículos 4×4, generadores, bombas de extracción de agua, la gestión de donaciones y la colaboración en las labores de limpieza en las zonas más afectadas, los clubes de cazadores volvieron a posicionarse como un verdadero ejemplo de compromiso social y unión en los momentos de mayor dificultad.