La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Navarra ha absuelto a un conductor zaragozano de 28 años de edad de un delito contra la salud pública después de haber sido interceptado por la Policía Foral cuando conducía en una carretera de la Ribera. El acusado dio positivo en alcohol y drogas y llevaba en el interior del vehículo una bolsa con 9,57 gramos de anfetamina.
La Audiencia Provincial concluye que dicha cantidad aprehendida, unida a la falta de otros elementos o útiles dentro del vehículo que hagan pensar en el tráfico de drogas, a la ausencia de grandes cantidades de dinero que puedan indicar que se consiguieron a través del tráfico de estupefacientes y el intenso consumo del acusado, avalado con informes toxicológicos, motivan su absolución.
Además, la droga tenía una “paupérrima riqueza del 19,2%”, lo que reduce la cantidad decomisada a 4,98 gramos puros de anfetamina. En este punto, conviene recordar que tal cantidad supera el máximo de acopio permitido durante cinco días (0,9 gramos), partiendo de una dosis media de consumo diario de 0,18 gramos de anfetamina, que la doctrina jurisprudencial ha considerado razonable como uso personal.
No obstante, la Audiencia considera que dicha previsión máxima es de carácter “meramente orientativo” y que, aislada de otros indicios, no puede ser el único elemento determinante para una condena. Por tanto, resume que “el único indicio calificable como tal sería la cantidad de droga” que le encontraron, lo que no es prueba suficiente para condenarle.
La Fiscalía solicitaba dos años de prisión, aplicando la agravante de reincidencia, ya que el acusado había sido condenado por tráfico de drogas en 2021.
Interceptado en la Ribera tras conducción evasiva
Los hechos ocurrieron sobre las 3:15 horas del 23 de abril de 2023, cuando el encausado circulaba por una carretera de la Ribera. Al percibir la presencia de una patrulla de la Policía Foral, y sabedor de que el turismo que conducía tenía la ITV caducada y de que había consumido una importante cantidad de speed y alcohol, además de que llevaba una bolsa con más sustancia entre sus pertenencias, comenzó a realizar maniobras evasivas.
Esta actitud motivó que los agentes solicitaran el apoyo de otra patrulla, que posteriormente logró interceptarlo y requerirle que bajara del vehículo.
El tribunal descarta el tráfico de drogas y avala el consumo personal
Cuando el encausado descendió del vehículo por la puerta del conductor, cayó al suelo una bolsa que contenía anfetamina. Según la Sala, la sustancia estaba destinada al consumo propio del acusado, quien tenía un historial de consumo de anfetaminas desde los 15 años y en la actualidad presentaba consumos ocasionales de alta intensidad durante los fines de semana.
En la fecha de los hechos, el acusado presentaba un cuadro de consumo perjudicial de anfetaminas, que afectaba de modo leve-moderado a sus facultades.