El mensaje comienza así. "Queridos clientes, amigos, viajeros, trabajadores y a todos los que habéis formado parte de nuestra historia". Y a partir de ese inicio, Anaís y Alberto, los propietarios del bar restaurante situado junto a la estación de servicio de Acciona en el sentido descendente de la Autovía A-12, la Autovía del Camino, relatan los últimos días de su negocio. El local, que tiene unos resultados estupendos y podría sin problema continuar la actividad, según sus arrendatarios, se ve sin embargo abocado al cierre después de que Acciona presentara concurso de acreedores por la situación de la estación de servicio, debido al resultado deficitario de la gasolinera. Así, en los próximos días, Anaís y Alberto dejarán de servir en las barras y en las mesas y tendrán que resetear después de bajar la persiana.
"Han sido años muy felices", declaran sus dueños
Su despedida continúa así: "No hemos tenido tiempo de despedirnos de todos vosotros como nos habría gustado. Todo este caos nos ha pillado por sorpresa, y en tan solo un mes nos han obligado a cerrar las puertas de nuestro restaurante y cafetería, lugares que hemos cuidado con tanto cariño durante tantos años".
"Siempre nos hemos dedicado a cuidar cada detalle, buscando que nuestro local fuera bonito, acogedor y visualmente agradable, para que os sintierais cómodos y desearais volver. Nuestra gastronomía de kilómetro cero, con producto local, ha sido nuestro sello y lo que nos ha diferenciado de otras áreas de servicio y restauración".

"Han sido años muy felices, porque la gratitud y la felicidad que hemos sentido venían directamente de vosotros, nuestros visitantes. Nos habéis respondido día tras día, viniendo a por nuestros pinchos, nuestros menús a la brasa, siempre con precios pensados para todos y todas. Nos habéis hecho grandes con vuestro apoyo constante".
"Gracias por vuestras palabras, siempre tan bonitas: “¡Qué rico está esto!”, “¡Qué bien!”, “¡Qué bonito!”, “¡Qué lugar tan espectacular!”. De verdad, nos llevamos todo ese cariño en el corazón.
Hoy, nos despedimos. En tan solo un mes nos han forzado a cerrar nuestras puertas, y tanto Alberto como yo queremos daros las gracias de corazón. Gracias, gracias y mil veces gracias por haber formado parte de esta aventura.
No tuvimos tiempo para una despedida como merecíais, pero las circunstancias actuales, las políticas y los cambios que está viviendo nuestra sociedad nos han llevado a este final inesperado.
Siempre estaréis en nuestro corazón".
Con cariño, Alberto y Anais