Dos miembros de una familia de Getxo fallecidos y otros dos heridos de carácter grave es el trágico balance de un accidente de tráfico ocurrido el pasado domingo en el Parque Natural de Ngorongoro situado en el norte de Tanzania.
Según informaron ayer fuentes cercanas a la familia, las fallecidas son la madre, Elena Renteria, y su hija Inés, mientras que el marido, Iñigo Lomas, y el hijo de ambos, Ignacio, resultaron heridos de gravedad. La chavala tenía 17 años de edad mientras que su hermano, 15.
Los cuatro se encontraban de vacaciones haciendo turismo por el país africano de Tanzania, una de cuyas etapas era un safari en la zona norte del país en el parque natural que conforma el extinto volcán de Ngorongoro.
El trágico siniestro tuvo lugar cuando la familia, que ocupaba un vehículo todoterreno en el que viajaron durante todo el día por la planicie del extenso cráter haciendo el safari, abandonaba el espacio natural subiendo por la pista principal del acceso del parque.
Se trata de un vial sin asfaltar y de tierra por el cual suben y bajan los vehículos de turistas en sus recorridos entre la extensión llana del cráter y la parte elevada donde se ubican los hoteles y lodges en los cuales se hospedan los visitantes. La gran altura que tienen que salvar, cerca de 700 metros en vertical, supone que la carretera se componga de varias curvas en zigzag muy cerradas que a la vez salvan una pendiente muy pronunciada.
Fue en una de esas últimas curvas, cuando restaban pocos metros para alcanzar la zona alta, donde ocurrió el trágico accidente. Según explicó ayer en Radio Euskadi un guía turístico local que fue testigo del siniestro, es una vía de difícil acceso en la que “se necesita mucha experiencia para conducir”.
“Saliendo del cráter hay una curva muy cerrada y una gran pendiente. Creo que el chófer no pudo cambiar las marchas del coche rápidamente; volvió hacia atrás, volcó y cayó hacia el cráter”, detalló el guía conocedor de la zona. Una caída de más de 600 metros en vertical con lo que el vehículo se precipi’tó dando varias vueltas de campana provocando la muerte en el acto de las dos mujeres de la familia mientras que los dos hombres resultaron heridos graves.
El padre presentaba fracturas de huesos en las piernas y en un brazo, de pronóstico grave, aunque según las últimas informaciones, su vida no corría peligro. El hijo quedó herido con lesiones en el pecho además de rotura de costillas y una posible perforación de pulmón, lo que supuso un pronóstico reservado.
Tras lo ocurrido, los guías y testigos del siniestro (al ser el acceso principal de turistas, el número de vehículos 4x4 es habitual y numeroso) auxiliaron en un primer momento a las víctimas. “Trasladamos a hombros a los heridos hasta arriba, a donde llegó la ambulancia del Gobierno para llevarlos al hospital”, contó el guía en conversación telefónica a Radio Euskadi.
El transporte sanitario llevó a las víctimas hasta la ciudad de Karatu, el núcleo urbano más cercano al Parque Nacional de Ngorongoro “y a donde llega el último tramo de carretera asfaltada”, indicaron a este periódico desde la agencia de viajes Horizonte Paralelo, especializada en estos safaris por el oeste de África.
Según las últimas informaciones, a la espera de la repatriación de los cadáveres de la madre y su hija, el padre y el hijo fueron trasladados ayer hasta un hospital en Nairobi, la capital del fronterizo país de Kenia.
Vecinos de Las Arenas
La familia era conocida en la zona de Las Arenas, donde tienen su residencia. El padre es abogado en Bilbao, mientras que su esposa trabajaba en los juzgados de la capital vizcaina. Sus dos hijos cursan estudios en el Liceo Francés, el colegio asentado en Zamudio, donde se educaban con el francés como idioma principal. Inés había terminado el último curso en el colegio e iba a acudir a la universidad, mientras que el hijo había finalizado el segundo curso de la ESO. El chaval jugaba a fútbol en el mismo colegio y la joven fallecida formaba parte del Club Hockey Stick Getxo, que según indicaron fuentes del mismo se encuentran “consternados” por la fatal noticia. Los compañeros de trabajo del padre en Acciona Bizkaia se están volcando para ayudar a la familia, colaborando con los seguros para tratar de acelerar la repatriación de los cadáveres.
Desde el Ministerio español de Asuntos Exteriores, por su parte, indicaron a la agencia Efe que tanto la embajada de Tanzania, el país africano donde ocurrió el accidente, como la de Kenia “está haciendo todas las gestiones necesarias para asistir a los afectados” en coordinación con las autoridades locales.
“Se ha informado a las familias desde que se tuvo conocimiento y se viene dando acompañamiento a las mismas desde entonces”, añadió un portavoz, después de que el siniestro ocurrido el domingo por la tarde transcendiera este lunes pasado.
Por su parte, el Gobierno vasco trasladó ayer sus condolencias y apoyo a los familiares de las dos fallecidas. El Ejecutivo de Lakua lamentó “el trágico accidente” y quiso transmitir “todo su afecto y sus más sinceras condolencias a la familia Lomas-Renteria y personas allegadas”, a las que también expresó su “cercanía y disposición para brindarles todo el apoyo y la ayuda que necesiten en estos momentos tan difíciles y dolorosos”.
Además, señalaron desde Lakua que la dirección de Acción Exterior se encuentra en contacto con las autoridades competentes para ofrecer toda la asistencia posible.
Al detalle
A un hospital de Nairobi
El padre y el hijo, Iñigo e Ignacio, heridos de diferentes consideración en el siniestro del Ngorongoro, fueron trasladados ayer a un centro sanitario de Nairobi, capital de Kenia, colindante a Tanzania.
Gobierno vasco en contacto con Tanzania
La dirección de Acción Exterior del Gobierno vasco está en contacto con las autoridades competentes para ofrecer toda la asistencia posible a la vez que trasladó sus condolencias a la familia.
Apoyo de compañeros
Los compañeros de Acciona Bizkaia donde trabaja como abogado el padre se están volcando con los seguros para tratar de acelerar la repatriación de los cadáveres de Elena e Inés.
Consternación de la alcaldesa de Getxo
Comunicado del Consistorio. La alcaldesa de Getxo, Amaia Agirre, expresó ayer su “consternación” por el fallecimiento de dos vecinas del barrio de Las Arenas en el accidente donde el resto de la familia Lomas-Renteria también resultó herida. En un comunicado hecho público en la mañana de ayer, la primer edil del Consistorio expuso sus “más sinceras condolencias” a todos los allegados de las dos víctimas mortales y puso a su disposición todos los recursos municipales para apoyar “en todo lo que fuera necesario” a la familia. También solicitó en su escueto comunicado escrito respeto a la intimidad de las víctimas del siniestro.