La titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Pamplona ha tomado declaración como investigado a un inquilino de la bajera de la Rochapea en la que se produjo el acuchillamiento mortal de Kayle Villar Pons, de 20 años, como supuesto autor de un delito de encubrimiento.
La magistrada que instruye el crimen ocurrido el pasado 9 de octubre decidió interrogar al testigo en calidad de investigado por haber ocultado el cuchillo utilizado en el crimen por Yahya Mazouri, de 27 años, después de que perpetrara el homicidio.
Los agentes de la Policía Municipal de Pamplona, encargados de la investigación de los hechos, decomisaron el arma homicida en la misma bajera situada en la calle Carmen Baroja Nessi, número 6. El autor del crimen, que se encuentra en prisión provisional, la había limpiado tras acuchillar a la joven asesinada.
También amenazada
El hombre citado como investigado por la magistrada del caso lo cogió posteriormente y lo guardó, según la explicación que dio en sede judicial, para proteger a su pareja, la cual también había sido amenazada previamente por el autor del crimen. Por este motivo, decidió esconder el arma homicida, declaró.
Ante estas explicaciones aportadas por el inquilino de la bajera, las diligencias abiertas por un delito de encubrimiento serán previsiblemente archivadas, al no haber ánimo por su parte de colaborar con el homicida ni encubrir los ehchos, sino simplemente evitar más agresiones por parte del autor del crimen.
