Agentes de Policía Foral, adscritos al Grupo Investigación Medioambiental (GRIM) han abierto diligencias penales a un varón como presunto autor de un delito contra los animales, ocurrido en una localidad del valle de Valdizarbe.

En fechas recientes, una patrulla operativa de la mencionada Brigada descubriría en un paraje del valle a los cinco animales en avanzado estado de descomposición, encerrados en una edificación con la puerta atrancada con un trozo de madera a modo de cuña. La muerte de los burros se produjo por inanición al carecer de acceso a comida y agua.

Fruto de la investigación policial, los agentes pudieron determinar la identidad de la persona responsable de los équidos, que ha sido citado en calidad de investigado como presunto autor de un delito contra los animales.

Dos años de cárcel

El Código Penal, en su artículo 340 bis punto 3, castiga la muerte de un animal doméstico, amansado, domesticado o que viva temporal o permanentemente bajo control humano, con pena de prisión de doce a veinticuatro meses, además de la pena de inhabilitación especial de dos a cuatro años para el ejercicio de profesión, oficio o comercio que tenga relación con los animales y para la tenencia de los mismos.

Las diligencias del atestado fueron remitidas al Juzgado de Guardia de Pamplona y a la Fiscalía de Medio Ambiente de Navarra.