La Fiscalía de Navarra ha decidido finalmente recurrir la decisión de un juez de Tudela de archivar la causa sobre la supuesta "venta" de una niña de 14 años a una familia residente en Catalunya para casarla con su hijo.

Lo han confirmado a EFE fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN), que señalan que la Fiscalía recurrirá el archivo provisional de la causa, decidido por el juez tras declarar la menor que su estancia era voluntaria. El archivo supuso la puesta en libertad de los cinco detenidos por este caso. Se trata de los padres de la menor, residentes en Navarra, del matrimonio de Mollerussa acusado de haberla "comprado", y de su hijo, de 21 años, con quien supuestamente contrajo un matrimonio forzado.

El caso se conoció el pasado sábado, cuando la Guardia Civil informó de la detención en Navarra de unos padres por "vender" a su hija de 14 años por 5.000 euros, cinco botellas de whisky y comida a un matrimonio de Mollerussa.

La investigación comenzó en enero cuando la Policía Local de Corella tuvo conocimiento de que un matrimonio de la comunidad romaní había vendido a su hija de 14 años a otro de Mollerussa para casarla.

Pasados los meses, los Mossos observaron a una menor pidiendo limosna ante un supermercado de Les Borges Blanques (Lleida). La recogieron y trasladaron a la comisaría para investigar si estaba en situación de desamparo, coaccionada para pedir dinero o si era víctima de alguna mafia.

Allí, acudieron a quienes ella requirió como "sus tíos", si bien los agentes comprobaron que no tenían datos filiales comunes con la menor y que había una búsqueda en el sistema informático estatal de la adolescente.

Finalmente, todos los presentes en comisaría explicaron que los padres de la menor habían dado "una dote" al matrimonio de Mollerussa, consistente en 5.000 euros, whisky y comida, a los supuestos "tíos", para que contrajera matrimonio "voluntariamente" con el hijo de ambos.

Imágenes de la 'fiesta'

De hecho, los Mossos conocen y disponen de una copia de la 'fiesta' que se celebró meses antes por el rito romaní con motivo de la boda entre la menor y el joven de 21 años, enlace que no tiene validez legal y del que no consta ningún registro oficial.

La policía catalana detuvo entonces al matrimonio catalán y su hijo, acusados de los delitos de mendicidad infantil, trata de ser humanos y matrimonio forzado al tiempo que la dirección general de atención al menor de la Generalitat se hizo cargo de la adolescente.

La Guardia Civil, por su parte, detuvo en Navarra a los padres de la menor acusados de trata de seres humanos con fines de matrimonio forzado.

No obstante, tras declarar en un juzgado de Tudela, el juez decretó el archivo provisional de la causa al considerar el testimonio de la menor más relevante que el resto de indicios. La chica manifestó estar residiendo voluntariamente y con el consentimiento de sus padres en Lleida, y negó que sus progenitores le hubieran forzado a contraer matrimonio ni a practicar la mendicidad.