La Semana Santa ha evolucionado más allá de su significado religioso para convertirse en un periodo de descanso y/o aventuras. Una oportunidad para desconectar de la rutina diaria y cargar la mochila de nuevas experiencias.
Si algo hemos aprendido en los últimos años es que no hace falta viajar miles de kilómetros para impregnarse de belleza natural, diversión y cultura. En Euskadi es posible disfrutar de parques naturales, ciudades con historia y gastronomía que encandila a miles de turistas cada año. Por ello, si estás pensando en descubrir Bizkaia durante esta Semana Santa, te proponemos tres opciones maravillosas para explorar.
El encanto de Urkiola
Este parque natural entre Bizkaia y Álava sorprende por su belleza escénica y su importancia geológica. Urkiola ofrece a los visitantes una experiencia única en medio de majestuosas montañas, densos bosques y prados verdes. Este enclave natural, protegido desde 1989, es hogar de una rica biodiversidad y alberga una gran variedad de especies vegetales y animales. Además, el parque es un destino popular para los amantes del senderismo, la escalada y otros deportes al aire libre, gracias a sus numerosas rutas y miradores panorámicos.
Bilbao y su esencia única
La capital vizcaina es un excelente destino para disfrutar en Semana Santa, combinando a la inteligentemente vanguardia y tradición. Pasear entre sus edificios de arquitectura moderna y patrimonio histórico, como el icónico museo Guggenheim, el de Bellas Artes o el Marítimo, casa perfectamente con un plan posterior de calle, viviendo el poteo en cualquiera de las arterias de Moyúa, Ledesma y Casco Viejo, repletas de bares y restaurantes.
Además, sus espacios verdes, como el Parque de Doña Casilda, contrastan con la modernidad de Abandoibarra o el pasado industrial de Zorrotzaurre, en pleno proceso de transformación e inspiración. En definitiva, Bilbao ofrece arquitectura, cultura, gastronomía y naturaleza en una combinación única.
Elorrio, belleza medieval en Bizkaia
En el corazón de Bizkaia el pintoresco pueblo de Elorrio, de origen medieval, conquista a sus visitantes por sus calles empedradas, sus casas señoriales y sus impresionantes monumentos, como la iglesia gótica de San Agustín y el imponente Palacio de los Larrea.
Con asombrosas vistas a las montañas, el municipio invita a adentrarse en la tradición cultural y recibir una cálida hospitalidad, Elorrio es el destino perfecto para aquellos que buscan explorar la esencia del País Vasco.
